Han pasado cinco meses desde que comenzaron los graves problemas en el comedor escolar.

Cinco meses desde que las familias de la ikastola de Durana detectaron que "algo pasaba con la comida":

"Desde el inicio del curso en septiembre aparecieron los problemas, con niños y niñas que volvían a casa casi sin comer porque no les gustaba lo que les servían".

"Llevábamos quejándonos desde el inicio del curso. Nuestros hijos siempre han comido muy bien en el jantoki, y este año hay días que han llegado a casa sin haber probado casi nada".

Quejas y denuncias continuas de decenas de familias, ampas y equipos directivos de varios centros escolares de Álava, como la ikastola Ikasbidea de Durana y el instituto de Murgia, que han tenido su respuesta.

Desde este lunes, 5 de septiembre, tres nuevas empresas de catering se encargan de los comedores escolares de 17 centros educativos de Euskadi que hasta ahora gestionaba Serunion: 11 en Álava, 3 en Bizkaia y 3 en Gipuzkoa.

Padres y madres aplauden la decisión, se muestran aliviados y reconocen que "no esperaban que el cambio llegara tan rápido".

"Mis hijos encantados con el cambio en el jantoki, el pequeño hasta ha repetido, así que hemos empezado muy bien".

Las familias consultadas por este diario están convencidas de que esta decisión del Departamento vasco de Educación se ha tomado gracias "a la presión continua que padres, madres y ampas han ejercido desde que apareció el primer problema en Durana".

"Han comido todo y han dicho que estaba muy bueno"

De este modo, las empresas Auzo Lagun, Goñi y Tamar han asumido desde hoy mismo la gestión, un cambio que los escolares han notado, tal y como han explicado padres y madres consultados por DNA. "Mis hijos han comido todo y han dicho que estaba muy bueno".

Una fuerte polémica ha afectado desde septiembre a colegios de Álava donde la empresa de catering Serunion se encargaba de traer a diario los menús escolares cocinados desde La Rioja, con la aparición de larvas e insectos en algunos platos servidos en la ikastola de Durana y en el instituto de Murgia.

Ampas y familias de Vitoria y Álava se plantaron ante el Gobierno Vasco a finales del año pasado para exigir la inmediata rescisión del contrato con Serunion.

El enfado y la indignación ha crecido a pasos agigantados con cada noticia que ha aparecido sobre la mala calidad de la comida que ha servido Serunion en los comedores escolares, y querían una solución lo "más rápido posible".

Serunion es la empresa de catering que se hizo con el contrato para servir el menú infantil en 11 colegios públicos de Álava y que ha sido sancionada con 40.000 euros y 20.00 euros por el Gobierno Vasco (entre otros motivos, por la presencia de larvas en el menú de la ikastola Ikasbidea).

La situación se agravó con tres denuncias en la ikastola de Durana: la aparición de lombrices en los platos de pasta servidos en el jantoki el 22 de septiembre, el aspecto y la acidez de los filetes en salsa que se retiraron el 8 de noviembre, y cuando el pasado viernes 10 de noviembre se dio un nuevo caso de comida en mal estado al detectarse insectos en las alubias que iban a servir.

Sin olvidar que el 21 de noviembre un total de 65 alumnos del instituto de Murgia no comieron el primer plato al detectarse pequeños insectos.

Ante esta situación, familias de la ampa de la ikastola de Durana tomaron una decisión contundente: subir a comer dos días a la semana para hacer un seguimiento de la calidad de la comida que se servía a diario en el jantoki de Ikasbidea.

La solución, cocinar en cada centro escolar

Las familias de Vitoria y Álava lo tienen muy claro: exigen disponer de comedores escolares en cada centro o en cada barrio donde exista una seguridad alimentaria con elaboraciones de calidad, esto es, la posibilidad de poder cocinar en cada centro con productos de kilómetro cero.

El pasado mes de diciembre numerosas familias, escolares y profesores se reunieron en el frontón del colegio de Salburua con una petición: disponer de instalaciones propias donde cocinar en uno de los locales vacíos de este barrio.

Los tres centros escolares de Salburua (Arantzabela, Errekabarri y Salburua) piden al Departamento de Educación del Gobierno Vasco y al Ayuntamiento de Vitoria una cocina profesional y de cercanía para los tres colegios, además de para el futuro instituto y las haurreskolas.

Porque disponer de cocina propia sin repercutir en las cuotas por comedor, además de reducir el despilfarro de comida, ofrecería a alumnos y alumnas alimentarse con productos frescos y de kilómetro cero.