La escritora Karmele Jaio (Vitoria-Gasteiz, 1970) presentó ayer en Bilbao su nueva novela, Amor capital (Destino), donde reflexiona sobre lo que la palabra amor esconde, como “los celos, la dependencia, el deseo, el sexo, el narcisismo, el miedo a la soledad, las relaciones de poder o las miserias emocionales”. Es también “un alegato a favor de un amor más amplio del que nos han enseñado, sobre todo a las mujeres, y donde la amistad ocupa un lugar importante”.

Jaio, en declaraciones a Europa Press Euskadi, dijo que tradicionalmente se ha enseñado a las mujeres a pensar que “el amor es su campo de juego, donde lo ganan o lo pierden todo”, mientras que a los hombres se les dice que es “una parte más de la vida e incluso se les enseña a defenderse de él y de sus consecuencias”. La autora alavesa, Premio Euskadi de Literatura por La casa del padre (2020), cree que “el amor pone a las mujeres en un lugar vulnerable, cuando lo importante es amar bien, algo que sitúa a la mujer frente a un sentimiento de contradicción ante el amor”.

“Mi protagonista trata de entender por qué ha amado de esa manera, en la que se ha olvidado hasta de sí misma, hasta sentirse pequeña y permitir incluso que no la traten bien”, afirma Jaio, quien cita a Alejandra Kollontai, una de las pensadoras que menciona en la novela cuando asegura que “Amar sí, diluirse en el amor, no”. Una de las claves del libro, tal y como subraya, son lo que define como “los otros amores, en especial, la importancia de la amistad”. “Somos testigos de muchas mujeres que dejan a sus amistades por una relación de pareja, para acabar aislándose cuando, el amor es ciego, pero las amigas, las amistades, no lo son”, agregó. En cuanto a la inclusión del término capital en el título junto al amor, Jaio explica que “vivimos en un mundo donde manda el mercado, el capital, un mundo más capitalista donde hasta nuestros amores son también, más narcisistas”. En esta novela, a partir de un funeral, la escritora reflexiona y habla de “la caída de una mujer en ese agujero que para muchas supone adentrarse en una relación amorosa”.