Álava empieza el camino que ha de guiar a las instituciones en la configuración de las políticas de financiación y gestión de las autovías y autopistas que componen la red viaria provincial en un futuro no muy lejano.
En concreto, la Diputación Foral va a dar el primer paso, de momento, valorativo, para conocer a través de un estudio cuya licitación se aprobó ayer en Consejo de Gobierno, las posibilidades existentes sin descartar ninguna a priori.
Según indicaron ayer portavoces forales consultados por DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA, el Ejecutivo provincial ha dado el plácet al inicio del proceso de licitación para la contratación de la consultora que redactará el informe que recoja todas las opciones al respecto.
El estudio de marrás deberá atender inexcusablemente al sistema de financiación y al de gestión y mantenimiento de las vías de alta capacidad de la red foral de carreteras, todo un entramado esencial en las comunicaciones por carretera de los corredores entre la meseta castellana y Europa y de estas con las cornisa cantábrica y con el este peninsular.
En este abanico de infraestructuras se encuentran todas las autovías (A-1, N-622 o N-240), los tramos de autopistas liberalizados y las carreteras que aún funcionan con peajes, como la AP-68 y la AP-1.
En principio, la documentación consultada explica que la licitación tiene un presupuesto máximo de 220.000 euros, IVA no incluido, y un plazo de ejecución de 26 semanas.
Mandato de ponencia
Al respecto, el Ejecutivo foral explica que la contratación de este informe da cumplimiento al mandato de las Juntas Generales de Álava a la Diputación Foral realizado a través de las conclusiones aprobadas el 30 de junio de 2022 en el seno de la Ponencia sobre el Sistema de Financiación y Gestión de las Vías de Alta Capacidad de la Red Foral Carreteras del Territorio Histórico de Álava.
Los mismos portavoces señalan que el estudio sentará las bases para definir el modelo de financiación y gestión de las vías de alta capacidad más adecuado, así como su calendario de implantación, tras analizar distintos elementos como las propias vías, tipo de vehículos, tarifas y bonificaciones.
El Departamento de Movilidad Sostenible e Infraestructuras Viarias realizará esta contratación en colaboración con la sociedad pública foral Arabat–Vías de Álava.
Precedente
El Consejo de Gobierno Foral ya licitó el pasado 23 de abril un primer estudio para analizar las alternativas tecnológicas más apropiadas en el caso de que se establezca un canon por uso en la autopista AP-68 una vez concluya la actual concesión de Avasa en noviembre de 2026.
La vía dejará de tener peajes, está todavía por ver si definitivamente, y su mantenimiento correrá a cargo de forma íntegra de las arcas públicas forales tras su reversión desde la Administración central. Un escenario cada vez más cercano y ante el que el Gobierno foral ha comenzado a dar ya algunos pasos.
Un acuerdo alcanzado la pasada legislatura por las Juntas Generales de Álava establecía que el modelo de gestión de la AP-68, que atraviesa el territorio a través de 55 kilómetros, y del resto de vías de alta capacidad será de carácter público, a través de la sociedad foral Vías de Álava/Arabat.
Nogales anunció que, teniendo en cuenta esta circunstancia, será necesario “redimensionar” la estructura de Arabat durante esta legislatura, para lo cual se creará la figura del director gerente para la entidad.
Hoja de ruta
El resultado de los dos estudios, que se presentará en las Juntas Generales de Álava, permitirá obtener una hoja de ruta para poder desarrollar un sistema de pago por uso en las vías de alta capacidad de Álava, estableciendo un nuevo modelo de financiación y gestión basado en parámetros de sostenibilidad en lo económico, social y medioambiental.