La empresa de transporte compartido Uber afronta una millonaria multa en Australia tras admitir que dio información engañosa a más de dos millones de clientes en sus avisos de cancelaciones entre diciembre de 2017 y diciembre de 2021, informaron este martes fuentes oficiales.
La Comisión Australiana de Competencia y Consumo (ACCC) informó en un comunicado que Uber acordó con el organismo regulador presentar ante el Tribunal Federal un documento conjunto aceptando que se le imponga una multa de unos 26 millones de dólares australianos (18,8 millones de dólares estadounidenses o 17,5 millones de euros).
Sin embargo, el tribunal tendrá la última palabra sobre el monto a pagar por violar la Ley Australiana de Competencia y Consumo al haber dado información engañosa o falsa en las advertencias referidas a los pagos por la cancelación de los servicios de transporte una vez hecha la reserva o los fallos en los algoritmos para calcular las tarifas de los servicios de taxis.
La ACCC explicó que la mayoría de servicios de la plataforma, incluyendo el popular UberX, permiten cancelar de forma gratuita las reservas cinco minutos después de que el conductor acepta brindar el servicio de transporte.
A pesar de ello, Uber mostró en su aplicación la advertencia engañosa sobre el pago por cancelación a más de dos millones de consumidores australianos, aunque en septiembre de 2021 la rectificó aclarando que los usuarios no tienen que pagar una tarifa adicional por las cancelaciones durante el período de gracia.
La ACCC también indicó que Uber dio información engañosa entre junio de 2018 y agosto de 2020 sobre el rango de las tarifas de su "Uber Taxi", que brindaba solamente en Sídney.
Eso se debía a que el algoritmo que utilizó para los cálculos de este servicio, que eliminó en agosto de 2020, inflaba los precios y favorecía al servicio de la plataforma, explicó la ACCC.
"Las plataformas digitales como Uber necesitan tomar las medidas adecuadas para monitorear la precisión de sus algoritmos y de la información que dan, los cuales pueden afectar el servicio que eligen los consumidores", remarcó en un comunicado la presidenta de la ACCC, Gina Cass-Gottlieb.