No se trata de la ira, la gula, la soberbia, la lujuria, la pereza, la envidia y la avaricia, los conocidos como los siete pecados capitales.

Sin embargo, al igual que estos, el Baskonia también comete otra serie de vicios y faltas que le han condenado a su particular purgatorio.

El conjunto azulgrana navega por los bajos fondos de la tabla, tanto en la Euroliga como en la ACB, competición esta última donde se ha condenado a una hazaña para lograr la clasificación para la siguiente Copa del Rey, por culpa de una serie de fallos y carencias en su juego que le condenan a sufrir tanto ante los transatlánticos continentales como frente a equipos sin pedigrí. Son los siete pecados capitales del Baskonia.

Forrest, demasiado individualista en ocasiones, trata de superar la defensa de Fall durante el Olympiacos Baskonia de Euroliga PETE ANDREOU

Los bases: Problemas para generar  

Para el recuerdo queda ya la magia de Darius Thompson y sus lecciones magistrales con la batuta o la dirección volcánica de un Codi Miller-McIntyre, que con otro estilo diferente, también conseguía hacer carburar a sus compañeros.

Este curso puede dar la sensación de que en el puesto de base hay más fondo de armario al contar con tres directores de juego desde el inicio de curso, pero ninguno de ellos ha conseguido hacer jugar al equipo como el base titular de las dos campañas anteriores.

Los bases abusan mucho del bote sin generar peligro, no encuentran conexiones con sus pívots y su único veneno llega a través de las penetraciones verticales de Forrest o con tiros de media distancia

El Baskonia padece por los problemas para generar juego de sus tres directores. Bases que abusan mucho del bote hasta casi agotar la posesión sin generar peligro alguno, que no encuentran conexiones con sus pívots y que su único veneno llega a través de las penetraciones verticales de Forrest o del tiro de media distancia de un Baldwin, que a veces funciona mejor como escolta, o de un Jaramaz, a quien se le han visto las costuras cuando enfrente ha tenido rivales de cierta entidad.

Lejos de lo esperado. Incapaces de dar soluciones al equipo en el ataque estático. Un problema serio hasta tal punto que Laso ante el Olympiacos buscó una alternativa extrema como jugar sin ninguno de los dos bases que tenía en pista.

Donta Hall, frente a Kostas Papanikolau durante el partido ante el Olympiacos PETE ANDREOU

Los ‘cincos’: Ni detrás, ni delante

Al igual que sucedió con los bases, en El Pireo ocurrió otro tanto de los mismo con los dos cincos del Baskonia. Hall y Diop sufrieron muchísimo y se mostraron incapaces de contener a los poderosos pívots del conjunto heleno.

Hall y Diop son dos jugadores de un perfil similar que necesitan de un base que les surta para poder anotar cerca del aro

El imponente Fall hacía pequeño a cualquiera de los dos interiores azulgranas. Además, en ataque tampoco son capaces de generarse puntos por si solos ya que son dos jugadores de un perfil similar que necesitan de un base que les surta para poder anotar cerca del aro, algo que no ocurre muy a menudo, ya que más allá de dos metros de canasta son prácticamente inofensivos. Ante esta situación, el técnico gasteiztarra probó a jugar durante muchos minutos sin ninguno de los dos en pista.

El problema con los dos cincos azulgranas no es que jugadores de la talla de Fall (9 puntos) o Milutinov (14) te hagan un roto, algo que entra dentro de la lógica viendo su físico y calidad. Lo graves es que, salvo contadas excepciones, cualquier pívot del rival les ha sacado los colores.

Buena prueba de ello es lo sucedido unos días atrás en Zaragoza cuando entre Bango y Dubljevic anotaron 34 puntos –17 cada uno– por los diez de los pívots baskonistas –Diop (2) y Hall (8)–. Escaso. Superados en defensa y en ataque.

Pablo Laso charla con Howard durante el partido ante el Efes en el que el escolta estadounidense se quedó sin anotar tras fallar sus cuatro triples Alex Larretxi

Los triples: Cruz con los porcentajes  

El paupérrimo 1/26 (3,8%) en triples con el que acabó el Baskonia el duelo de París, pudo parecer en su momento un 'Expediente X'. Sin embargo, lo que queda claro que el porcentaje del equipo más allá desde los 6,75 metros ha bajado y mucho respecto a las campañas anteriores.

La escuadra azulgrana promedia este curso un más que discreto 29,2% desde más allá del arco en Euroliga, lejos del 36,3% de la campaña 2022-23 o del 37,1% del pasado ejercicio.

Sin embargo, lo realmente preocupante es que sus rivales le acribillan desde el triple logrando porcentajes más que notables. En la ACB se encuentra a estas alturas en un 40,5%, mientras que en la Euroliga supera el 45%. La cruz del triple.

Pérdidas: Demasiados regalos  

Tras la derrota en el pabellón de La Paz y la Amistad, Laso consideró que una de las claves fueron las pérdidas de su equipo. No era la primera vez que el técnico gasteiztarra recurría a los balones regalados para explicar uno de los factores que costaron la derrota al conjunto azulgrana. “Cuando pierdes 17 balones en Barcelona es difícil ganar”, señaló tras el severo varapalo sufrido en el Palau semanas atrás. 

Y es que las inocentes pérdidas han sido una rémora para la escuadra baskonista a lo largo del curso y eso que no juega a un ritmo alto, como le le gustaría imprimira su técnico.

De momento, su media de pérdidas en Euroliga es de 11,7. No es una mala cifra, ya que con menos balones perdidos están Mónaco (9,7), un equipo de vértigo como el París (10,4) y Partizan (11,5).

El Baskonia es el segundo equipo de la Euroliga que menos asistencias reparte con 15,7, aspecto en el que solo supera al Zalgiris (14,1)

Sin embargo, fruto de su incapacidad para generar juego, el cuadro azulgrana sale mal parado en el balance entre asistencias y pérdidas. Y es que con 15,7 pases de canasta por partido, aspecto en el que solo supera en la competición continental al Zalgiris (14,1), el Baskonia cuenta con un saldo favorable de +4, registro que tan solo está por delante del los 3,4 del Fenerbahce, 2,9 del Asvel y 1,7 del Zalgiris.

Moneke mira desde la zona un tiro exterior de París Lee Baskonia

Defensa: 90 puntos, en ACB  

El Baskonia es incapaz de mantener el tono físico en dos competiciones de la exigencia de la Euroliga y la ACB y paga su desgaste en este último torneo donde presenta unos números en defensa poco acordes a su potencial.

Y es que mientras que en Europa recibe una media de 79,4 puntos por partido, lo que le sitúa como uno de los tres mejores en este aspecto, en la liga doméstica hasta ahora su media de puntos en contra es de 90,3. Demasiados.

Buena prueba de ello es que se encuentra en una situación diametralmente opuesta a la Euroliga, ya que en la ACB con estos números, el conjunto azulgrana se sitúa como una de las tres peores defensas del campeonato.

Howard celebra la victoria contra el Madrid con Jaramaz, Ndiaye y Savkov Alex Larretxi

Plantilla corta: 13, pero alguno residual  

El Baskonia cuenta con 13 jugadores en plantilla, una cifra que viendo la dureza del calendario, sería algo justa para afrontar en condiciones las dos competiciones. Si a todo ello añadimos que alguno de ellos, como Savkov, con dos apariciones testimoniales en Euroliga en las que sumó 11:44 minutos entre ambos partidos o incluso en ACB, donde tan solo actuó los 15:19 minutos del Palau ante el Barça, la rotación se reduce aún más.

El escolta ruso no es el único con un papel testimonial. Raieste, afectado por una lesión, también ha jugado poco. La participación del estonio se reduce a 7:02 minutos de media en dos partidos de Euroliga.

Jaramaz promedia poco más al haber jugado 8:11 en siete de los 11 duelos que se han disputado de la competición continental, mientras que Ndiaye acumula 10:56 en nueve. Se trata de cuatro jugadores con poco peso, por lo que la rotación real se reduce a tan solo nueve jugadores hasta la fecha. Demasiado escaso.

Luwawu-Cabarrot penetra ante la oposición de Hermannsson durante la victoria conseguida ante el Alba Berlín Pilar Barco

Apagones: Desconexiones fatídicas  

Laso ya ha señalado en más de una ocasión que le gustaría que su equipo fues más regular. El técnico gasteiztarra reclama una mayor solidez y consistencia durante los 40 minutos y evitar esos apagones en los que encaja parciales fatídicos que finalmente cuestan el partido.

De momento, de los 19 partidos disputados, el Baskonia tan solo ha ganado el primer cuarto en tres de ellos –Alba de Berlín en la Euroliga y Joventut y Zaragoza en la ACB–.

Han sido muchos los parciales de escándalo recibidos en muy pocos minutos de juego. Esas caída de tensión se pagan caras. También tienen su peaje las flojas puestas en escena.

El gélido arranque que está protagonizando en los partidos, le ha obligado a ir a remolque y ya en muchas ocasiones ha sido incapaz de remontar. De momento, de los 19 partidos disputados, el Baskonia tan solo ha ganado el primer cuarto en tres de ellos –Alba de Berlín en la Euroliga y Joventut y Zaragoza en la ACB–. El último de los siete pecados capitales de este Baskonia.