Han sido muchos los aficionados al baloncesto los que han censurado la sanción impuesta por el Juez Disciplinario Independiente de la Euroliga a Yabusele y el resto de jugadores tras la penosa trifulca protagonizada en el segundo encuentro del top 8, disputado el jueves en el Wizink Center al considerarlas insuficientes.

Analistas y medios especializados también han considerado ridículo el castigo impuesto a los implicados en esa batalla campal ya que esperaban unas penas ejemplares.

De hecho, el mundo del baloncesto así lo entendía viendo la gravedad de lo ocurrido y los precedentes anteriores. De hecho, hace más de diez años en una tangana durante un partido entre el Olympiacos y Galatasaray, que en nada se pareció a la protagonizada por los jugadores del Real Madrid y Partizan, el castigo impuesto fue mayor al de ahora. 

En un lance de ese duelo disputado en diciembre de 2013, durante una lucha por el rebote en un tiro libre, Mirza Berzic y Pops Mensah-Bonsu acabarían a golpes en una pelea a la que se sumaría después Georgios Printezis.

Pese a estar lejos del bochornoso espectáculo vivido en Madrid, la Euroliga acabaría sancionando a Berzic con cuatro partidos y una multa de 15.000 euros, mientras que los otros dos implicados recibieron tres partidos cada uno y 10.001 euros.

La sanción se completaría con otras cuatro cuatro sanciones económicas a Olympiacos que en total ascendían a 39.000 euros, además, del cierre del pabellón del conjunto heleno durante un partido.

Pues bien, esta vez no ha habido ni cierre de pabellones, la suspensión de encuentros ha sido menor en la gran mayoría de los casos y la suma de las multas económicas no supera por mucho las impuestas entonces, cuando solo hubo tres jugadores implicados.

Y es que finalmente han sido tan solo cinco partidos de suspensión al jugador del Real Madrid Guerschon Yabusele y dos al del Partizán de Belgrado Kevin Punter, mientras que, el madridista Gabriek Deck también fue sancionado con un partido, igual que el jugador del Partizan Matthias Lessort. El Real Madrid y el Partizan, además, tendrán que pagar una multa de 50.000 euros cada uno por conducta antideportiva. 

Sanciones escasas

Unas sanciones que han sido vistas como escasas. De hecho, Dionysis Aravantinos, director de Eurohoops, así lo hizo saber en su cuenta de Twitter. “¿Quién dice que una pelea similar no volverá a suceder en un futuro cercano? Las suspensiones no han sido lo suficientemente grandes, así que también podrían hacerlo. Si esto sucediera en la NBA, Guerschon Yabusele cumpliría una suspensión de 30 partidos al menos”, indicó.

Más allá fue el analista de datos del baloncesto Darius Garuolis, quien se mostró perplejo por la decisión del Juez Único. El especialista en baloncesto italiano criticó con dureza la decisión y preguntaba al Juez Único de la competición. Entonces, ¿qué tienes que hacer para que impongan la peor sanción de 280.000 euros y 4 años de suspensión en el #EuroLeague? ¿Un genocidio? ¿Un apuñalamiento no fatal sería una prohibición de seis o siete partidos, por favor?”.

Y es que Garolulis considera que los cinco partidos de suspensión a Yabusele se quedaron cortos, habida cuenta de que podía haber lesionado de gravedad a un compañero y recordó que en la NBA, por ejemplo a Artest por una acción menor, fue castigado con 86 partidos.

Más irónica ha sido la respuesta de Sitapha Savané. El presidente del Gran Canaria lanzó un dardo, tanto a la ACB como a la Euroliga, al ver el diferente criterio que tienen a la hora de imponer sanciones. El exjugador del cuadro insular fue directo y no necesitó más que cuatro palabras para mostrar su perplejidad y disconformidad con la resolución de la Euroliga. “Apuntar con el dedo, 4 partidos...”.

Savané mostró de este modo su indignación cuando la competición doméstica impuso cuatro partidos de sanción a su técnico Jaka Lakovic tras señalar con el dedo a los colegiados mientras abandonaba la pista al ser expulsado con dos técnicas, algo que da a entender fue desproporcionado, viendo ahora que tras una llave de judo solo se han puesto cinco.

El tuit del senegalés, que superaba las 140.000 visualizaciones y 1.000 me gusta, no tardó en hacerse viral y contó con muchos comentarios que censuraban también la diferencia de criterio de la ACB.

En uno de ellos se mostraba como los insultos del madridista Hezonja a un colegiado se quedaban sin castigo, lo mismo que la protesta de Yabusele fuera de lugar en la cara del árbitro Emilio Pérez Pizarro tras una derrota del Real Madrid ante el Barcelona.