El último y difícil test copero conduce este domingo (20.00 horas) al Baskonia hasta el Martín Carpena de Málaga. Luego ya no habrá más desafíos por delante para el equipo vitoriano que el asalto a la séptima Copa del Rey de la historia.

Sin embargo, antes de que llegue uno de los momentos más apasionantes de la temporada en Badalona, los de Peñarroya deben hacer un ejercicio de abstracción e intentar someter a uno de los gallitos de esta edición liguera como el Unicaja, un plantel renacido esta campaña de la mano de Ibon Navarro y que incluso ha estado a punto de ser cabeza de serie para el torneo del KO.

El objetivo en esta vigésima jornada liguera radica precisamente en llegar a la Copa con buenas sensaciones. Y, para ello, nada mejor que conquistar una plaza difícil como la costasoleña, donde únicamente el Real Madrid ha salido indemne esta temporada. El Unicaja se distingue por ser un anfitrión muy fiable, mientras que el Baskonia está titubeando más de la cuenta cada vez que actúa como forastero –sobre todo en la Euroliga–, de ahí que las reservas estén justificadas antes del salto inicial.

La escuadra alavesa aspira a hacer borrón y cuenta nueva tras la derrota en Kaunas. Los hombres de Peñarroya carecieron de mordiente en los tres últimos minutos para plasmar su buen trabajo en tierras lituanas y ahora llega otro test del más alto nivel en la ACB con el fin de llegar a la Copa en un buen estado, tanto físico como anímico.

La exigencia para el Baskonia en el Martín Carpena será máxima. No en vano, aguarda un Unicaja al que Ibon Navarro está sacando el máximo jugo y mantiene este curso en la zona noble de la tabla pese a la reciente derrota en el Gran Canaria Arena.

El cuadro malagueño, que llega descansado a la cita tras haberse suspendido a mediados de esta semana su compromiso continental en la Champions League de la FIBA ante el Galatasaray, está muy compensado en todas las posiciones y se perfila como un hueso duro de roer.

El técnico alavés mantiene entre algodones a Barreiro y Brizuela, pero todo hace indicar que ambos jugadores serán de la partida. Si por algo destaca el Unicaja es por la profundidad de su banquillo y por apenas existir diferencia entre el nivel de los titulares y los suplentes. La grave lesión de Augusto Lima ha sido compensada con el fichaje de Yankuba Sima, una de las referencias de la pintura malagueña junto a Kravish y el polivalente Osetkowski.

Heidegger volverá a tener minutos para ahondar en su acoplamiento al equipo Josu Chavarri Erralde

Al margen de que cualquier triunfo siempre es positivo para afrontar un torneo del calibre de la Copa, el Baskonia necesita sumar el triunfo con el fin de seguir la estela de Real Madrid y Barcelona en la cúspide de la clasificación. De momento, y a excepción de aquella fea derrota en el Nou Congost de Manresa, la trayectoria liguera azulgrana está siendo prácticamente inmaculada.

La incógnita del descarte

Una jornada más , la incógnita radica en las horas previas en conocer el descarte de Peñarroya. Todo hace indicar que Hommes, que fue dado de baja la semana pasada ante el Zaragoza para hacer hueco a Heidegger, volverá a ser el sacrificado en Málaga.

El ala-pívot estadounidense, aquejado de problemas físicos en una rodilla, no está pasando por su mejor momento en el Baskonia. Su rendimiento en los últimos tiempos ha descendido bastantes enteros y ante el Zalgiris no fue una excepción. Jugó poco más de nueve minutos y no anotó ningún punto fallando además los dos triples que intentó, algo que desembocó en una valoración de -2.

Sin embargo, lo más chocante de su actuación en tierras bálticas no fue su errática estadística sino la anécdota curiosa que protagonizó en la primera mitad tras pedir un tiempo muerto en una esquina ante la presión de Achille Polonara.