Las recientes lluvias torrenciales vividas en la India han causado ya más de 40 muertos por inundaciones, desprendimientos y corrimientos de tierra, además de decenas de desaparecidos. Pero la vida sigue y la población intenta seguir con sus compromisos, pese a que las calles parezcan ríos.
Así, una pareja no quería perderse su boda y, ante la imposibilidad de utilizar el coche para circular por una avenida anegada, decidió introducirse en una enorme olla a modo de balsa ya vestidos con los trajes que iban a utilizar en la ceremonia. Ayudados por dos hombres que empujaban la olla y a quienes el agua les cubría por encima de las rodillas, los novios lograron llegar a la ceremonia, un ritual hindú con un reducido número de invitados.