BILBAO. La Ertzaintza investiga a los conductores que tienen el carnet de conducir suspendido para garantizar el cumplimiento de las sentencias por las que se han decidido retirarles el permiso, según informó el Departamento de Interior del Gobierno vasco.

Los agentes de la Policía vasca investigan de forma rutinaria a aquellos ciudadanos que tienen suspendido el carnet para que impedir que puedan ponerse al volante, saltándose las prohibiciones establecidas a través de resoluciones judiciales.

Precisamente, agentes de la Unidad de Trafico detuvieron ayer de madrugada en Gasteiz a un conductor acusado de quebrantar una sentencia que le impedía conducir temporalmente. El vehículo en el que circulaba el sospechoso fue interceptada en las afueras de la ciudad, concretamente en la A-3302, a la altura del cruce de Estarrona.

Los ertzainas solicitaron la correspondiente documentación a su ocupante y se confirmó que tenía el permiso de conducir retirado de forma temporal por resolución judicial. Además, el turismo no había pasado la correspondiente Inspección Técnica de Vehículos (ITV). Por ello, el coche fue inmovilizado y su conductor detenido por quebrantar la orden judicial.

PERSONAS CONDENADAS

Entre las tareas que, de forma rutinaria realizan las diferentes Unidades de Tráfico, está la de verificar que, efectivamente, no conducen aquellas personas que por haber sido condenadas en vía penal o haber perdido la totalidad de los puntos tienen el carnet retirado.

Para garantizar el cumplimiento de estas sentencias se investiga de forma rutinaria a los conductores que están en esta situación, habiéndose podido constatar que, en algunos casos, intentan quebrantar la orden circulando por vías secundarias que consideran menos susceptibles de localizar controles rutinarios.

Con el objetivo de evitar éstas conductas delictivas, además de los diferentes controles en las carreteras, los agentes de tráfico establecen de forma habitual dispositivos de vigilancia en torno a conductores sancionados.