Vitoria. Si hay algo que es inevitable y seguro en esta vida es la muerte. Pero que lo natural sea que suceda no significa que sea vista con normalidad y tranquilidad. Todo lo contrario. Cuando menos, genera respeto aunque actitudes hacia ella hay tantas como personas. Para muchos es un tema incómodo y qué decir cuando toca, de una manera u otra, tratarlo con los más pequeños. Ahí es casi un tabú. O eso es lo que pensaba hasta hace poco Txabi Arnal.

El escritor y profesor de la Universidad del País Vasco ha querido bucear entre obras literarias actuales publicadas en castellano (tanto originales como textos traducidos) y destinadas al público infantil para comprobar cómo se trata a la muerte en los títulos que caen entre las manos de los más pequeños y sus conclusiones han cambiado un tanto su percepción de partida. "Se trata de una forma muy natural. Tenía la idea preconcebida de que estos libros serían de tipo panfleto, que el didactismo tendría más peso que el valor literario, ya que ante temas tan incómodos solemos dar prioridad a lo que queremos transmitir. Y me he llevado una sorpresa: la mayoría de los álbumes tienen un gran valor literario y afrontan el tema con naturalidad, en cierto modo dejando de lado el objetivo didáctico. Lo más importante aquí no es el tema, sino el relato", explica el autor.

Así se describe una de las conclusiones principales que Arnal ha plasmado en una tesis que ha realizado bajo la dirección de Xabier Etxaniz Erle y José Manuel López Gaseni, profesores del Departamento de Didáctica de la Lengua y la Literatura de la Escuela Universitaria de Magisterio del Campus de Álava. Para este trabajo se han estudiado 57 libros para niños, todos ellos publicados entre 1980 y 2008 (como El pato y la muerte, de Wolf Erlbruch; Regaliz, de Sylvia van Ommen; y ¿Cómo es posible?, de Peter Schössow) ya que el investigador quería que "los álbumes a estudiar estuvieran vivos, para que si alguien quisiera buscarlos o comprarlos pudiera conseguirlos".

Esta investigación está pensada para ser aprovechada por profesionales que trabajan con niños (profesores de Educación Infantil, educadores?) y que requieren de ayuda para hablar sobre la muerte con ellos. "Ofrezco recursos. Lo que digo es: si quieres valerte de la literatura, que sepas que este libro cuenta la muerte de este modo. Y si no, tienes este otro que lo trata desde este punto de vista, o este otro?", explica Arnal. Y es que, entre otras cosas, este trabajo incluye un referencial bibliográfico y una ficha de cada álbum estudiado. "Debemos saber que también existen libros de este tipo. Y que además son parte de la literatura infantil, muy adecuados para ser leídos por niños", añade.