Lo que era un secreto a voces ya es oficial. Tras llegar al mediodía junto al resto de la expedición procedente de Andorra, el Baskonia ha anunciado que Joan Peñarroya deja de ser el entrenador del conjunto azulgrana y que será Dusko Ivanovic quien tome el mando del equipo hasta final de la presente temporada.
El técnico catalán, que llegó a Vitoria en el verano de 2022, pone fin de esta manera a su etapa al frente de la nave azulgrana al haber perdido la confianza del club por el mal inicio de campaña del equipo, que acumula un balance de 4 victorias y 3 derrotas en la ACB y una única victoria en cinco jornadas de la Euroliga.
Peñarroya sale por la puerta de atrás del Baskonia en un momento de crisis, ya que encadena cinco derrotas consecutivas entre Euroliga y ACB, algo que no sucedía desde el final de la última etapa de Ivanovic en Vitoria, en la campaña 2021-22.
Además, el equipo ha dejado una muy mala imagen en sus dos últimos compromisos ante el Panathinaikos y el Morabanc Andorra, a los que se presentó con solo ocho jugadores disponibles y, en el caso del segundo, terminó con únicamente seis jugadores sanos por la lesión de Howard, cuyo alcance se desconoce aún.
Evidentemente, Peñarroya no es el único culpable de la deriva del equipo, ya que se ha encontrado con una situación insostenible y con una plantilla con enormes carencias especialmente en el puesto de base, donde siguen sin llegar refuerzos pese a haberse disputado ya 12 partidos y al bajo rendimiento de Nico Mannion, a años luz de la expectativas que se generaron con su fichaje.
La falta de criterio en la elaboración de juego, donde se está acusando en exceso la marcha de Darius Thompson, y la ausencia de una referencia a la que entregar el balón en los momentos calientes de los partidos fueron los principales motivos de las tres primeras derrotas de la actual racha del equipo, que nada pudo hacer en Atenas y en Andorra con la plantilla en cuadro.
Sin confianza desde verano
La pérdida de crédito de Joan Peñarroya por parte de la dirección deportiva no es algo que haya sucedido únicamente en los últimos cinco partidos. La eliminación en cuartos de final de Copa del Rey y del 'play off' de la ACB el curso pasado ya generó dudas en el club, que optó por no ejecutar la opción unilateral de prorrogar el contrato del de Terrassa tras no cumplir los objetivos que habrían supuesto su renovación automática.
Tuvieron que pasar 23 días en los que su futuro estuvo en el aire para que el Baskonia lo confirmara en el puesto tras renegociar los términos de su contrato por una cantidad inferior a la inicialmente pactada para su segundo año.
Esa situación y el hecho de que posteriormente el actual entrenador de la Virtus Bolonia, Luca Banchi, afirmara que estuvo en Vitoria negociando su fichaje por el Baskonia y que fue su deseo de seguir al mando de la selección de Letonia lo que lo evitó, dejaron al preparador de Terrassa en una situación de debilidad.
El bajo rendimiento del equipo y en especial la semana de triple derrota en el Buesa Arena contra el Bayern, el Zalgiris y el Unicaja agotaron el poco crédito que le quedaba.
El encargado de devolver la ilusión al baskonismo será nuevamente Dusko Ivanovic, un técnico con el que se viene negociando desde hace días y que dirigirá al equipo vitoriano por cuarta vez tras las etapas comprendidas entre 2000-2005, 2008-2012 y 2019-21. Con el montenegrino, el club del Buesa Arena ha conquistado tres Ligas ACB, tres Copas del Rey y una Supercopa.
Final duro a una etapa
La derrota de ayer ante el Andorra por 85-68 será un triste epílogo que no hace justicia al paso de Joan Peñarroya por Vitoria-Gasteiz. El técnico catalán logró revitalizar el equipo tras una deprimente campaña 2021-22 con Dusko Ivanovic y Neven Spahija en el banquillo y volvió a ilusionar a la parroquia azulgrana con un vistoso baloncesto ofensivo y altas anotaciones, especialmente en los duelos en el Buesa Arena, donde se mostró prácticamente intratable durante todo el curso pasado.
Su momento más dulce fue sin duda la racha de 12 victorias que encadenó en aquel mágico mes de diciembre en el que el Baskonia pasó por encima de los grandes equipos de Europa y llegó a liderar la Euroliga, con mención especial a la doble victoria en Estambul contra el Efes y el Fenerbahce y al triunfo contra el Real Madrid, al que superó las cuatro veces en las que se midieron a lo largo de la temporada.
Luego, la inoportuna sanción a Pierria Henry por un resultado inconcluyente en un control antidopaje desestabilizó a la plantilla y dejó a Darius Thompson sin un suplente de garantías. Quedarse fuera del play off de la Euroliga y la eliminación en cuartos de final de la Copa y de la ACB dejaron un sabor agridulce en una temporada brillante en cuanto a juego y resultados en la fase regular. En su historial quedan un total de 83 partidos oficiales dirigidos, 39 en Euroliga y 44 en ACB.