Además de algunas decisiones arbitrales sin sentido, sobre las que el club ya ha mostrado su malestar en dos ocasiones, otro de los factores que está condicionando al Deportivo Alavés esta temporada es su actuación en los epílogos. Muchos son los puntos que se le han escapado a los albiazules en la recta final, tanto con el Chacho Coudet como con Luis García Plaza en el banquillo, y eso ha tenido consecuencia directa en la tabla.

Ante el Leganés, sin ir más lejos, el conjunto gasteiztarra volvió a pecar de endeble en los últimos minutos. Después de hacer lo más difícil, como lo era remontar el partido tras los dos penaltis señalados en contra -indefendible el segundo de ellos-, Munir dejó con la miel en los labios a los babazorros al borde de la prolongación. Y lo hizo de cabeza, que no es su punto fuerte. De lo contrario, el Glorioso estaría ahora fuera del descenso.

Si se repasan los 38 goles en contra del Alavés en lo que va de campaña, puede comprobarse que nueve de ellos han sido en los epílogos -a partir del minuto 80-, lo que viene siendo un 24 %. Este dato, eso sí, cobra mayor importancia cuando se analizan los puntos que se han perdido debidos esos tantos. Y no son pocos. Muy distinta sería la situación de los albiazules en la batalla por la salvación si hubieran amarrado todos ellos.

Blanco se lamenta por el gol de Munir para el 3-3 en Butarque. LaLiga

Observando casos concretos, las dianas de Iago Aspas (ante el Celta, J1); Sivera en propia (Rayo, J11); Sørloth (Atlético, J14); y Solís (Girona, J19) provocaron que el Glorioso perdiera encuentros en los que había llegado a la recta final con tablas en el marcador. Es decir, cuatro puntos perdidos. Especialmente dura, por supuesto, fue la derrota frente a los de Míchel, sufrida en Mendizorroza y de manera imprevista. Por un error propio.

Ahora bien, más dolorosos para la clasificación fueron los goles de Dani Gomez (contra el Valencia, J18) y el mencionado de Munir. Empatar un partido que se iba a ganar supone perder dos puntos, y esa fue la sensación amarga en ambas citas. El Alavés hizo más méritos que sus rivales, pero no fue capaz de mantener la seriedad durante los más de 90 minutos que duró cada contienda. Y eso en Primera División se suele pagar muy caro.

Asimismo, Sivera también tuvo que ver cómo perforaban su meta en el epílogo Lukebakio (ante el Sevilla, J6) y Parejo y Comesaña (Villarreal, J13). La diferencia es que ninguno de esos tantos tuvo relevancia directa en el desenlace del encuentro, tanto para bien como para mal. El Glorioso fue capaz de aguantar a los hispalenses en el Paseo de Cervantes (2-1) y solo hicieron que sentenciarle los dos encajados en La Cerámica (3-0).

EL 'GLORIOSO' SERÍA 14º CON 30 PUNTOS

Con esos ocho puntos más en su necesitado casillero, que se dice pronto, el Alavés sería decimocuarto ahora mismo, igualado con el Getafe de José Bordalás. Un escenario no libre de peligro, pero sí mucho más favorable para afrontar esta primera mitad de la segunda vuelta. La zona de descenso, que la limitaría el Valencia con 22, estaría a ocho de distancia. Con ese colchón, sería mucho más fácil dar tiempo a las ideas del Chacho.

Mejorar en los epílogos es, por tanto, uno de los puntos a mejorar de la escuadra albiazul de cara a tener más opciones en la lucha por la permanencia. Ahí entra en juego la experiencia o valentía para, en momentos de tensión, saber mantener la cabeza fría y no cometer errores. La cuestión es que, si ya se está fallando cuando no existe esa gran exigencia, cómo va a ser capaz de aguantar el equipo cuando sí la hay.

A favor, por cierto, también ha marcado algún gol el Alavés en la recta final. Han sido seis, en concreto. Y solo la mitad, los de Kike García en el Benito Villamarín y el de Carlos Vicente contra el Leganés en casa, sirvieron realmente para algo. Los del Santiago Bernabéu (Kike y Protesoni) o el Real Valladolid en Mendizorroza (Kike) no cambiaron el resultado.

Parte de esa fortaleza suele fraguarse como local, pues siempre es más fácil aguantar e, incluso, ir a por los partidos con la grada remando, pero no le están yendo nada bien las cosas al Glorioso este curso en el Paseo de Cervantes. Solo el Real Valladolid ha sumado menos ante su gente en lo que va de campeonato.