De menos a más y con la ambición por las nubes. Así se muestra Laura Moreno sobre las posibilidades del Deportivo Alavés femenino de poder entrar esta temporada en el play off. La delantera andaluza admite que tanto ella como el equipo han pagado durante la primera vuelta de la competición ese peaje de la adaptación a una categoría difícil, pero que ahora se hallan en su mejor momento y todavía pueden mejorar más. Al margen de eso, Moreno –que ha marcado tres dianas hasta la fecha con la elástica albiazul– puntualiza que está muy contenta en su primera experiencia lejos de su hogar.

A pesar del pinchazo de la última jornada ante el filial del Barcelona en Ibaia, las sensaciones transmitidas son buenas. ¿Cómo se encuentra de ánimo la plantilla?

–La verdad es que el equipo ha empezado este año nuevo muy bien y yo creo que en la primera vuelta fue como una etapa de adaptación para todas, ya que cada una veníamos de clubes diferentes. Por otro lado, el Alavés también puso una entrenadora nueva al frente. Ahora y después de las vacaciones, el equipo ha recargado pilas y estamos en una buena dinámica. Incluso diría yo que estamos en nuestro mejor momento.

Laura Moreno posa en Ibaia Jorge Muñoz

"Si seguimos en esta línea porque el equipo va a ir a más y haremos realidad este objetivo que nos hemos marcado"

Sobre el último partido, el equipo vio cómo le anularon dos goles y además se fallaron algunas ocasiones claras, ¿Cómo están?

–Es cierto que el encuentro fue muy completo por parte de todas desde el principio hasta el final. Nosotras intentamos meter gol, pero la colegiada nos anuló dos tantos que eran legales. También nos costó finalizar alguna que otra jugada, pero el partido terminó con un Barcelona pidiendo la hora desde el minuto 30 de la segunda parte. Y es con eso con lo que nos tenemos que quedar y ahora hay que seguir trabajando.

La clasificación está muy igualada. ¿Cree que será posible acceder al ansiado play off?

–Yo creo que sí, en especial si seguimos en esta línea porque el equipo va a ir a más. Estoy segura de que si continuamos así, haremos realidad este objetivo que nos hemos marcado cuando arrancó la campaña.

Por otro lado, ¿ven posible materializar el sueño del ascenso?

–Claro, al final nuestro sueño es subir a Primera y si no tuviéramos ese objetivo en mente, no serviría para nada trabajar y luchar todo lo que lo estamos haciendo. De sueños se vive y nada es imposible. Todo depende de nosotras. Si seguimos con este buen trabajo, seguro que ese sueño estará más cerca.

Laura Moreno admite que el equipo ha pagado el peaje de la adaptación a una categoría difícil Jorge Muñoz

Hoy toca visitar al Albacete en un encuentro trascendental. ¿Cómo lo afrontan?

–Es un rival directo que nos lleva un punto en la tabla y será un encuentro difícil, pero nosotras tenemos que salir con la actitud de siempre. Es decir, ir al 100% y siendo conscientes de que nos podemos traer los tres puntos para Vitoria. Además, luego ya nos vienen todos los equipos que son rivales directos.

De aquí a final de temporada, cada partido será una final. ¿Cómo se gestiona esa presión?

–Esa lucha y presión nos ayudan en nuestra rutina diaria, ya que si no tuviésemos ese objetivo de entrar en el play off, quizá el día a día se nos haría más largo y aburrido. Además, el equipo es muy consciente de ello y cada una de nosotras aportamos nuestro granito de arena para lograrlo.

"Después de siete temporadas en el Betis, creo que era el momento de cambiar de aires y al final el Alavés es un gran club, tanto en entidad como en equipo"

En la primera vuelta, la ausencia del gol era un elemento a mejorar que, por fortuna, parece haberse subsanado ya. ¿Cómo ve este aspecto?

–Al final, fue un peaje que pagamos en esa fase de adaptación del equipo y ahora la plantilla está muy enchufada y con ganas de seguir metiendo más goles. En ese sentido, nos cercioramos ya de que nuestras finalizaciones son mejores y también es por la confianza que tenemos. Nuestro juego también ayuda a las jugadoras ofensivas y es que estamos más tiempo en campo contrario. Al final, nos tenemos que quedar con todos esos aspectos porque, al final, el equipo que gana es el que mete la pelota en la red.

Hablando ya de usted, ¿cómo ha vivido esta campaña ese cambio de Sevilla a Vitoria?

–La verdad es que después de siete temporadas en el Betis, creo que era el momento de cambiar de aires y al final el Alavés es un gran club, tanto en entidad como en equipo. Y aunque sea un cambio drástico, me está encantando todo: la ciudad, el club, el equipo... Estoy muy contenta.

¿Cuáles son las principales diferencias que ha percibido entre el Betis y el Alavés?

–Es verdad que el Betis se considera una entidad familiar, pero desde el primer momento que llegué aquí, me he sentido parte del Alavés y del equipo, y esa pertenencia a un club nada más llegar es muy positiva.

¿Cómo fue el marcharse de casa por primera vez?

–Al final ha sido mi primera salida y es cierto que al principio fue un poco complicado porque tuve que dejar atrás a mi familia, a mis amigos y partir de cero. Aun así, mis compañeras y la gente de aquí han hecho que todo sea más llevadero y se han involucrado mucho para que mi adaptación sea mejor. Gracias a ellas no tengo ninguna queja y estoy muy contenta.

"Al principio me costó adaptarme, pero poquito a poco creo que me he ido convirtiendo en una vitoriana más"

Esa adaptación a la ciudad, sin duda, tiene repercusión en el rendimiento sobre el césped, ¿verdad?

–Sí, sin duda. No solo a nivel individual sino también colectivo. Somos un equipo nuevo y muchas jugadoras venimos de fuera y de jugar diferentes modelos y estilos de juego. Al final, te tienes que conocer a ti mismo y a tus compañeras y esa fase hay que vivirla. Ahora estamos ya en otra fase en la que ya nos conocemos mucho mejor y cada vez estamos más cómodas y eso el grupo lo nota positivamente.

¿Cómo se define como jugadora?

–Me considero rápida, de balones al espacio y una jugadora constante.

¿Y cómo persona?

–Humilde, y como digo yo, de pueblo. Yo soy muy risueña y suelo intentar que mis compañeras se rían conmigo. Además, también me encanta contar chistes.

Siendo del sur, ¿cómo lleva el frío de Vitoria?

–Bueno… ahí voy (risas). Al principio, me costó adaptarme, pero poquito a poco creo que me he ido convirtiendo en una vitoriana más y lo voy llevando mejor, pero sí que ha sido un cambio muy brusco.

¿Cuáles son sus hobbies cuando no entrena al fútbol?

–Estoy estudiando un máster para ser profesora de Educación física en un futuro. Luego, en mi tiempo libre me gusta ir al gimnasio, conocer la ciudad, su gastronomía, la cual es muy buena, e ir al cine.