En estos momentos, hay 598 psicólogos colegiados en Álava, de los cuales aproximadamente la mitad tendrían su ámbito de actuación en la rama clínica o sanitaria. Esta cifra se ha ido incrementando en los últimos años. “Sin los psicólogos/as sanitarios que trabajamos en la privada, la salud mental colapsaría”, avisa el vicedecano de este colegio, José Antonio Pérez Suárez.
La carrera de Psicología es una de las más demandadas. ¿No hay hueco laboral para tanto titulado?
–Psicología es una carrera muy demandada, pero hay que tener en cuenta que para ejercer no basta con finalizar los cuatro años de carrera. Para trabajar en el ámbito público hay que hacer un examen muy exigente para tratar de acceder a una de las solo 14 plazas de Psicólogo Interno Residente (PIR) que se ofertaron en Euskadi en 2024. Y después de la formación PIR, hay que opositar para poder trabajar como psicólogo clínico, cuestión harto complicada porque hay muy pocas plazas disponibles. Para ejercer la Psicología Sanitaria en el ámbito privado es necesario cursar un Máster General Sanitario, que dura unos dos años y que tiene un coste económico absolutamente desorbitado para los estudiantes en universidades privadas, y con muy pocas plazas en las universidades públicas. Hay mucho hueco laboral para los psicólogos, pero hay un embudo que dificulta que los graduados accedan al mercado laboral en el ámbito clínico o sanitario.
Otra barrera para ir a terapia es la económica. ¿Qué se puede hacer al respecto?
–La solución pasa por fortalecer el sistema público de salud, especialmente en salud mental, para que todo el mundo pueda permitirse acudir al psicólogo/a si lo necesita.
¿Se necesita un psicólogo educativo en cada centro de educación Primaria, Infantil y Secundaria, además del orientador?
–Por supuesto, y es una demanda no atendida del Colegio de la Psicología de Álava, que llevamos haciendo ya demasiados años. Es absolutamente necesaria esta figura del psicólogo en los centro educativos, que no puede ser sustituida por otras figuras. Solo basta con preguntar en cualquier centro educativo al profesorado, un colectivo que lo demanda con insistencia también.
¿Planea el COP algún tipo de iniciativa o actividad nueva?
–En el COP de Álava estamos trabajando activamente para que las autoridades implementen la figura del psicólogo en Atención Primaria, para el incremento de las plazas PIR y para que aumenten de forma muy muy significativa las plazas de psicólogo en atención especializada. Además, necesitamos que en cada centro educativo se implemente de forma urgente la figura del psicólogo educativo. Otro tema que nos preocupa enormemente es que no hay ningún convenio entre el Colegio de Psicología de Álava con Gobierno Vasco, Diputación o Ayuntamiento para la asistencia psicológica en situaciones de emergencia o catástrofe. Es imprescindible la intervención de psicólogos en todos los casos de intentos de suicidio o en suicidios consumados para la comunicación a familiares, en accidentes de tráfico, en asesinatos o violencia de género, acompañando a otros profesionales como Bomberos, Policía Local, Médicos, Enfermeros, etc. , como así demandan también estos colectivos. Y en el COP tenemos profesionales formados en Emergencias que podrían ser de mucha ayuda. Hemos visto en la tragedia de la DANA en Valencia la importancia de la atención psicológica especializada tanto en los días posteriores a la catástrofe como en fases posteriores, para prevenir la aparición de múltiples patologías como el Trastorno de Estrés Postraumático. Nuestras intervenciones son útiles y necesarias. El punto de optimismo y esperanza está en que, tanto la población general como los profesionales de muchos colectivos, son conscientes de la importancia de nuestro trabajo, y que cada vez demandan más a las Administraciones medidas como las que proponemos desde el COP.