La capital alavesa tiene oficialmente casi 900 años de historia, y por ello su patrimonio arquitectónico antiguo es más que nutrido. Tanto, que el 20% de sus edificios son anteriores al siglo XX, lo que hace que, sumados los barrios de oro que se levantaron al calor de la tardía revolución industrial vitoriana, cerca de la mitad de su parque de edificaciones tenga más de 50 años.
Un 20% anteriores a 1900
Según el Proyecto Vivienda 2023 del Ayuntamiento gasteiztarra, en la ciudad hay 5.570 edificios anteriores al año 1900, un 20,06% del censo total, y entre ese año y 1950 se construyeron otros 1.450, un 5,22% del total. Fue a mitad del siglo XX cuando la industria vitoriana, con la llegada de Imosa, la actual Mercedes (1954); Forjas Alavesas (1951) o Areitio (1947) despegó y atrajo a la ciudad a miles de familias de Andalucía, Galicia, Castilla y León, Navarra o Extremadura. Se construyeron así, entre 1951 y 1960, otros 1.857 edificios, la mayoría residenciales, un 6,69% del total existente hoy día, a los que sumarían otros 2.490 (8,9% del censo actual) entre 1961 y 1970. Nacían Zaramaga, Ariznabarra, Adurza, El Pilar, Coronación, Errekaleor, Desamparadas o Abetxuko, barrios cuyas construcciones, sumadas a las ya existentes, hacen que hoy día un 40,93% de los edificios de la ciudad sean anteriores a 1971.
Inmediatamente después, antes de 1975, se levantaban el populoso barrios de Aranbizkarra, y luego llegaron Sansomendi, Gazalbide y Txagorritxu. Así, hasta 1980 se sumaron al parque de edificios de la ciudad otros 3.115, un 11,3% del total actual. En la siguiente década, con las primeras grandes manzanas de Lakua (que ya se había empezado a edificar en los sesenta en la zona de Arriaga), y San Martín, la ciudad gana otras 2.860 edificaciones, a las que en los noventa, sobre todo con la construcción de Lakuabizkarra, se añaden otras 3.690.
La burbuja
En aquellos tiempos, en los inicios de un nuevo siglo, Vitoria se había vuelto a quedar pequeña para sus habitantes, lo que unido a una burbuja inmobiliaria por aquel entonces aún en gestación, hizo que entre 2011 y 2010 la ciudad creciera como nunca lo había hecho antes. Un total de 5.097 edificios se levantaron en aquellos años, ni más ni menos que el 18,36% del total actual.
Luego llegó el pinchazo de la burbuja, la crisis económica y una década, la que va de 2011 a 2020, en la que en Vitoria se construyó menos que nunca en los últimos setenta años; un total de 1.384 edificaciones. En lo que llevamos del presente decenio Vitoria sigue en una senda muy similar, con 216 nuevas edificaciones, y de nuevo la sensación de que la ciudad se le está quedando pequeña a sus habitantes, y especialmente a los jóvenes.
Prueba de ello es que hasta un 15% de las viviendas en venta logra comprador en menos de una semana y hasta una de cada cuatro cambia de manos en menos de un mes en Gasteiz, según Idealista.
El 26% de las viviendas en venta en Vitoria logra comprador en menos de tres meses; un 22%, en un plazo de entre tres meses y un año; y solo un 13% tarda más de un año en encontrar comprador, lo que da una imagen de la situación actual.
Para contribuir a revertirla, el Gobierno Vasco dio luz verde en octubre a dos convenios de colaboración con la empresa Madeilia para la gestión y construcción de dos promociones en régimen de alquiler asequible, con un total de 225 viviendas ubicadas en Aretxabaleta a las que el Ejecutivo aporta ayudas directas por un total de 10,12 millones de euros. Esta es una nueva especialidad creada en noviembre de 2022 para potenciar la edificación de viviendas sociales por parte de empresas privadas, con el apoyo del Gobierno Vasco.
Usos de los edificios
Por otro lado, en cuanto al uso principal de los 27.769 edificios censados en Vitoria, lógicamente la mayoría, 13.430, están destinados al uso residencial, a vivir en ellos. Sin embargo, destacan también las 5.852 construcciones que albergan industrias. Hay además otros 3.756 catalogados como solares, 2.661 edificios singulares, lo que da una idea de la riqueza patrimonial de la ciudad; y 764 dedicados a la práctica deportiva.
Ademas, 519 construcciones se dedican al culto religioso o a usos culturales, 456 a oficinas, 124 a turismo y otros 105 al comercio.
Riqueza patrimonial en peligro
De lo más de 7.000 edificios anteriores a 1950 de Vitoria, algunos se encuentran en una situación preocupante. Aunque hay muchos más con sus propios problemas, hay varios de ellos que destacan por su mala situación estructural, y otros que han logrado renacer previa reconversión para diferentes usos. Bajo el ejemplo de Montehermoso, de la casa del Cordón y sobre todo de la Catedral de Santa María; los palacios Maturana-Verástegui, Bendaña cobran ahora nueva vida, como lo hará el de Ruiz de Vergara, sede del recién nacido centro Izaskun Arrue.
Otros, sin embargo, languidecen y hasta se encuentran en serio peligro, como los palacios Escoriaza-Esquível y Álava-Esquível del Casco Viejo, la Casa de los Alfaro y la gasolinera Goya, que ni siquiera es centenaria, y el monumento a la Batalla de Vitoria, todos ellos en la lista roja de patrimonio en peligro de Hispania Nostra.
Cinco millones para rehabilitar viviendas en la capital alavesa
Ensanche 21, la sociedad encargada de desarrollar y ejecutar la política municipal en materia de rehabilitación de edificios y viviendas, regeneración y renovación urbana, ha tramitado hasta la fecha más de cinco millones de euros de fondos europeos para la rehabilitación de viviendas.
La citada sociedad ha recibido hasta finales de agosto un total de 411 expedientes que permiten acometer mejoras y reformas en un total de 1.167 domicilios que mejorarán en un 85% de los casos sus niveles de eficiencia energética en fachada, cubierta y obras interiores.
La sociedad urbanística municipal ha tramitado en concreto ayudas para la rehabilitación de viviendas asignadas a los fondos Next Generation por valor de 5.168.212,03 euros en el último año.
El pago del dinero consignado a este programa se realiza a la finalización de las obras y tras la presentación de la correspondiente justificación por parte de los solicitantes. En ese sentido, desde el Ayuntamiento se especifica que las documentaciones presentadas por las comunidades de propietarios y residentes a título particular han posibilitado abonar ya 1.169.221 euros.
Desde julio de 2022 y mediante la suscripción de un convenio, “Ensanche 21 tiene asumidas las funciones de entidad colaboradora del Departamento de Vivienda y Agenda Urbana del Gobierno Vasco para los programas de ayuda en materia de rehabilitación residencial del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia financiado por la Unión Europea”, indicó Borja Rodríguez, presidente de Ensanche 21.
Esta convocatoria con Fondos Next Generation comenzó en julio de 2022 y en junio del pasado año se cerró temporalmente, ante el gran volumen de solicitudes recibidas, al superarse los objetivos marcados y esperando poder reabrirla de nuevo con una posible asignación de más fondos.
“Durante los once meses que permaneció activa la convocatoria se recibieron en Ensanche 21 un total de 411 expedientes, alcanzando a diferentes obras de mejora y rehabilitación en un total de 1.167 viviendas”. El 88% de esos expedientes (364) se corresponden a obras realizadas por particulares en el interior de sus domicilios, mientras hay 13 presentados por comunidades de propietarios por proyectos técnicos elaborados en sus inmuebles.
Los 34 expedientes presentados y que se corresponden a obras de mejora de la eficiencia energética con actuaciones en fachadas y/o cubiertas de edificios residenciales suponen el 54% del millar de viviendas beneficiadas con las ayudas de fondos europeos (631).