La temporada 2022-23 del Alavés llegó ayer a su punto final en Orriols. Un desenlace extraordinario que ha servido para regresar a Primera tras nueve meses de máxima exigencia. Después del agóniica victoria en el Ciutat de Vàlencia, el Glorioso es de pleno derecho equipo de la máxima categoría. Tras concluir el curso y, al igual que en el colegio, ha llegado la hora de recibir las notas por el rendimiento ofrecido.
Los pupilos de Luis García han cumplido el objetivo establecido al inicio del curso y, por ello, es evidente que la plantilla albiazul ha saldado con gran nota el desafío de esta campaña. No obstante, no todos los futbolistas del conjunto vitoriano han trascendido de igual manera y, por ello, las valoraciones varían entre aquellos que han sido pilares indiscutibles en el ascenso y otros que, desafortunadamente, han asumido un rol más secundario.
La columna vertebral del ascenso a Primera ha estado conformada por varios pilares indiscutibles como Sivera, Duarte, Abqar, Sedlar, Guridi, Tenaglia y Rioja. Todos ellos han marcado las diferencias en una temporada donde la igualdad entre los aspirantes a Primera ha sido la tónica dominante. A ellos se les han sumado otros como el veterano Salva, Benavídez, Moya Róber, Jason, Abde, Villalibre, Miguel y Sylla. Todos han conformado un vestuario que será recordado con un especial cariño por parte de la afición albiazul.
Sivera: El de Jávea ha sido una pieza clave del Alavés. Tras varias temporadas a la sombra de Pacheco, ha brillado en un curso donde se ha reivindicado gracias a la continuidad dispuesta entre los palos. Solvencia máxima en la portería.
Owono: Siempre comprometido y entregado desde el banquillo, el canterano se estrenó en liga ante el Albacete. Se mostró solvente durante el empate ante los manchegos y ha sido el más beneficiado por el periplo copero del Alavés.
Maras: Se consolidó como un seguro de vida en la primera vuelta junto a su compañero Abqar. Exhibió su rigor defensivo hasta que una grave lesión en el menisco le apartó de los terrenos de juego desde el mes de marzo.
Abqar: La mejor irrupción del Alavés en esta temporada. El marroquí se ha adueñado de la retaguardia gracias a sus pletóricas condiciones físicas y su buena lectura de los partidos. No obstante, en las últimas jornadas ha cometido algunos errores impropios en él.
Laguardia: Las exigencias económicas de LaLiga impidieron su continuidad desde el inicio del curso y eso ha dificultado su entrada en el once inicial. Un claro líder en el vestuario que, sin alzar la voz, ha acatado un rol más secundario.
Sedlar: Hombre de la absoluta confianza del cuerpo técnico. Un jugador polivalente que ha estado al servicio del Alavés tanto en la defensa como en el centro del campo. Ha sumado en todas sus participaciones y ha sido titular en la recta final del ejercicio.
Duarte: El almeriense dio un paso al frente tras el descenso de categoría. Impecable en tareas defensivas, también ha sumado su aportación en el plano ofensivo. Además, se asentó en el eje de la zaga cuando el Alavés más lo necesitó por las bajas.
Javi López: Recambio de garantías para Duarte. Ha ofrecido mejores sensaciones en ataque que en el plano defensivo, pero tan solo tiene 21 años. Cumplió con nota cuando tuvo que reemplazar al almeriense y se está asentando en el primer equipo.
Tenaglia: Un absoluto líder en el lateral derecho. Además de contribuir a la solvencia colectiva, el de Talleres ha hecho valer su condición de llegador en segunda línea. Poderoso en el juego aéreo y una amenaza constante en sus incorporaciones al ataque.
Arroyo: Ha tenido sus momentos, pero poco más. Su cambio de posición del central al lateral no le ha beneficiado. No ha logrado superar a Tenaglia en el carril derecho y en alguna ocasión se le ha visto nervioso y falto de atención en el repliegue.
Blanco: Su llegada a Vitoria durante el mercado invernal brindó un nuevo perfil a la sala de máquinas. Un claro protagonista de la segunda vuelta del Alavés. Se ha reencontrado con su mejor versión gracias al rigor defensivo y una buena lectura de juego.
Benavídez: Un ‘pulpo’ en la sala de máquinas. Pese a jugar al límite y alguna expulsión, ha causado una grata sensación a la parroquia albiazul. A sus 25 años, todavía dispone de un gran margen de mejora para asentarse en el fútbol español.
Moya: Fue indiscutible durante el mes de febrero y marzo. Aportó frescura desde el banquillo y fue el hombre clave en la agónica victoria ante el Málaga. Su exquisito golpeo de balón ha sido una amenaza en el balón parado.
Guridi: Incombustible. Ha contribuido tanto en la mediapunta como en el pivote. Un protagonista claro de la temporada albiazul. El desgaste físico le hizo mella durante alguna fase del curso, pero llegó al desenlace en un gran estado de forma. Eso sí, le faltó suerte de cara a portería.
Salva Sevilla: Veteranía para el Glorioso. El andaluz fue otro fichaje de la marca de Luis García y ha brindado al Alavés madurez en los momentos más delicados. Su calidad ha marcado las diferencias y ha sumado cuatro goles decisivos. Ha sido una figura clave en el vestuario.
Balboa: Un trabajador nato. Ha estado inmerso en la dinámica del primer equipo y ha ayudado al filial en varios compromisos ligueros. Ha disputado minutos de gran calidad donde ha demostrado sus dotes defensivas y su entrega por el escudo. Otro de los beneficiados por el largo periplo copero.
Rioja: El hombre gol del Alavés. La principal amenaza ofensiva del equipo con 10 goles y cuatro asistencias. Comenzó el curso con el runrún de una posible salida, pero pronto demostró su fidelidad por el Alavés y fue indiscutible durante toda la temporada.
Abde: El canterano es la viva imagen del futbolista capaz de desequilibrar un partido. La jerarquía de Rioja le ha impedido gozar de continuidad, pero casi siempre ha generado peligro durante sus actuaciones. Dio un golpe sobre la mesa en el partido ante el Málaga.
Jason: Ha dado un paso al frente durante su segunda temporada con el Alavés. Le costó participar en la primera vuelta, pero ha sido útil en la recta final del curso gracias a su letal golpeo de balón. Además, se puso al servicio del equipo en el lateral cuando así lo demandó el guión.
Rober: Encontró su sitio tanto en la mediapunta como en el extremo derecho. Su capacidad para filtrar pases y el sacrificio en la presión le otorgaron mayor protagonismo en las últimas jornadas. Su doblete ante el Leganés fue de un valor incalculable.
Alkain: Su protagonismo ha decrecido con el paso de las jornadas. Comenzó el curso como una pieza clave, pero apenas ha trascendido en la recta final. En sus apariciones dejó pinceladas de su desborde y una clara vocación goleadora aun siendo un futbolista de banda.
Villalibre: Su llegada a Vitoria dio un salto de nivel en el último tercio. Se estrenó con un doblete antes de vivir una larga pájara ante el marco rival. Acabó como un pilar indiscutible con el gol en Orriols. Su carisma propició una comunión perfecta con la grada.
De la Fuente: Esfuerzo y sacrificio en el 'nueve'. Pese a no sumar unas grandes cifras goleadoras, su insistencia en la presión ha sido un intangible para el Alavés. Siempre generoso en los esfuerzos, tuvo que jugar durante varios partidos teniendo molestias para paliar las bajas en la punta.
Sylla: Comenzó la campaña con un gol que brindó tres puntos ante el Leganés, pero una desafortunada lesión ante el Ibiza le apartó del equipo durante tres meses. Aportó mordiente yendo a los espacios, pero no se ha consagrado entre los titulares a las órdenes de Luis García. Le ha tocado ser un revulsivo.
Panichelli: El argentino aterrizó en Vitoria durante el mercado invernal como un jugador de proyección para el futuro. Sin embargo, las bajas en la delantera propiciaron su debut con la elástica albiazul. Demostró su poderío físico ante el Albacete. Es un rematador de área con el que se necesitará paciencia.
Abdallahi: Un proyecto de la cantera albiazul que no ha derribado el muro del primer equipo. Salió cedido al Istra en busca de una continuidad de la que no iba a gozar en una temporada de máxima exigencia. Posee unas buenas condiciones futbolísticas y su contrato con el Alavés expira en junio del 2025.
Hara: Un espejismo. Era una de las novedades del curso y había grandes expectativas depositadas en él. No obstante, tuvo que salir cedido al no adaptarse a las exigencias de la categoría de plata. Metió un gol ante el Lugo, pero se le vio fuera de lugar en las pocas ocasiones en las que pudo saltar al verde.
