Si en algo puede apoyarse el Deportivo Alavés en el decisivo duelo por el ascenso que disputará el sábado en Gran Canaria es en que ya ha pasado por esta situación en numerosas ocasiones. Alcanzar la gloria está cerca, ya que los vitorianos dependen de sí mismos, pero a la vez será muy difícil obtener un triunfo ante una UD Las Palmas que estará igualmente motivado, contará con el apoyo de sus aficionados y, además, ascendería virtualmente con un empate. Sin embargo, si el conjunto babazorro lo ha conseguido en cinco ocasiones a lo largo de su historia, ¿por qué no creer en que pueda repetirse?

En caso de certificar el sábado el regreso a Primera División, esta sería la sexta etapa del conjunto gasteiztarra en la máxima categoría y también su ascenso más rápido después de caer a Segunda. El primer ascenso albiazul a la élite data del año 1930, cuando el equipo se proclamó además campeón de Vizcaya, federación a la que estaba adscrito. Esa primera etapa en la División de Oro duró tres temporadas y terminó en 1933 cuando el equipo, huérfano de figuras como Ciriaco y Quincoces y sumido en una crisis financiera, regresó a Segunda.

Habría que esperar más de 20 años y una guerra civil hasta que en 1954 los vitorianos consiguieron su segundo ascenso con el técnico Manolo Etxezarreta al mando. Esta vez su estancia en Primera fue más corta, ya que tras dos campañas el equipo regresó a Segunda en 1956 y esa vez la espera para volver a estar entre los mejores del panorama nacional sería mucho más larga.

Manolo Serrano celebra uno de los goles que dio el ascenso al Alavés en 1998 L&P

Concretamente, pasaron 42 años hasta que en el curso 1997-98 dos goles de Manolo Serrano y uno de Sivori contra el Rayo Vallecano dieron al Alavés de Mané su tercer ascenso a Primera División. Esta fue la etapa más gloriosa de la historia del club, con dos participaciones en la Europa League (por entonces Copa de la UEFA) y el recordado subcampeonato europeo de 2001. En 2003 y tras cinco campañas seguidas en Primera, el equipo certificó su descenso a la División de Plata, algo que compensaría dos años después, en 2005, con su cuarto ascenso a la máxima categoría, aunque en esta ocasión la aventura solo duró un año.

La quinta y hasta ahora última etapa en la élite es la más reciente en la memoria de los aficionados, ya que fue la más larga (2016-2022) y terminó hace un año con un nuevo descenso a Segunda División, mazazo del que tendrá la oportunidad de reponerse mañana regresando a a la máxima categoría por la vía rápida. En caso de lograrlo, esta sería la primera vez que los mismos dirigentes repiten ascenso a Primera.