Las puertas de los centros educativos comienzan a abrirse de forma paulatina estos días para iniciar las clases, ya con fundamento, la próxima semana. Álava inicia así un nuevo curso más caro para las familias, con menos aulas y alumnos por el descenso de la natalidad, a la expectativa de lo que depare la Ley de Educación que se debate en el Parlamento Vasco.

Además, se pone en marcha un nuevo sistema de admisión de alumnado, que establece cuotas de familias vulnerables y no vulnerables en cada centro, y que también está complicando el periodo de matriculación a las familias, según Denon Eskola, la federación de asociaciones de padres y madres de la escuela pública alavesa.

Alumnos entran a un centro educativo. Archivo

Con todo este cóctel sobre la mesa, “la incertidumbre y zozobra es un poco mayor para las familias”, indica la presidenta de Denon Eskola, Lourdes Errasti. A ello se suma el último conflicto del transporte escolar que “el Gobierno Vasco tiene que solucionar antes de que empiecen las clases”, considera.

Éstas son las principales preocupaciones que traen de cabeza a las familias al empezar las clases. Sin embargo, en la escuela pública, las familias somos peleonas y estamos implicadas con la educación de nuestros hijos e hijas, así que, aunque la nueva ley nos tiene a todos un poco desconcertados, ahí estaremos, peleando como siempre”, apunta Errasti.

Al igual que a otras madres, a la presidenta de Denon Eskola lo que le interesa es la calidad en la educación en los 74 centros de Álava. “Que nuestras criaturas sean de donde sean, vengan de donde vengan y traigan la mochila que traigan, tengan la mejor y más completa educación, que les enseñe a ser ciudadanos del territorio en el que vivimos. Y dar prioridad al euskera, nuestra lengua”, subraya Errasti, para la que el garante de que así sea es la escuela pública. “Ahí es donde debemos hacer hincapié y por lo que debemos apostar”, destaca.

Sobre la Ley de Educación, aunque aún no está definida, ya afecta a la matriculación de este año por el nuevo sistema de admisión puesto en marcha. “Nos preocupa y nos agobia bastante, ya que no nos parece correcto que se intente equiparar la escuela pública con la concertada; creemos que la pública tiene que ser la prioridad; habrá que esperar a la nueva ley, pero por lo que hemos visto hasta ahora, no nos termina de convencer, no parece que se le dé el valor que queremos”, opina. “Así que, nuestras reivindicaciones van a seguir estando ahí este curso, vamos a seguir trabajando por que la escuela pública sea el eje vertebrador del sistema vasco de educación, ésa pelea también la vamos a tener este año”, asiente.

Familias vulnerables

En cuanto al sistema de admisión que los centros deben cumplir con un cupo determinado de alumnos y alumnas procedentes de familias vulnerable con el fin de evitar guetos, la portavoz en Álava de Denon Eskola reconoce que el proceso está siendo complejo. Defiende que las gelas tienen que se plurales, con niños y niñas de todo tipo y condición, y que tanto la escuela pública como la concertada tienen que mostrar esa diversidad. No obstante, piensa que la pública ya lo estaba haciendo. “Siempre hemos sido garantes de la pluralidad y diversidad; además, hemos dado muestras de que somos sinónimo de calidad en la educación”, valora la presidenta de Denon Eskola en Álava.

Imagend e archivo de un aula del colegio San Prudencio de Vitoria Alex Larretxi

“Estamos de acuerdo en que exista esta diversidad y en que los colegios reflejen la realidad de la sociedad, pero no en que eso suponga un cierre o merma de la atención en las escuelas porque este curso ya se han cerrado aulas o no se ofrecen todas las del año pasado al haber menos niños y niñas; es un problema muy complejo y de casuística muy diferente en cada centro”, explica.

“Por un lado hablamos de fijar cuotas para mostrar el reflejo de la sociedad, pero lo hacemos en un contexto de descenso de la natalidad; hay muchos menos niños y niñas y, entonces, los centros se encuentran ya en la tesitura de, si no tengo alumnos, igual en unos años tengo que cerrar centros, lo que obligará a reestructurar todo el sistema educativo; el Gobierno Vasco ya está bajando los ratios por aula, y eso lleva al cierre de clases, a que haya profesores que no van a poder trabajar...”, detalla. “Por eso, el Gobierno Vasco tiene que empezar a prever y solucionar esos problemas”, plantea Denon Eskola.

Aunque hasta mediados de mes, Educación no cerrará los datos definitivos de matriculación, la federación de padres y madres de la escuela pública alavesa habla de un descenso de aulas por curso en algunos centros escolares. “De ahí nuestra pelea para que, a la hora de cerrar una clase, en lugar de hacerlo en la escuela pública, se cierre en la concertada”, reivindica.

“Así como hace una década cuando había largas listas de espera para matricularse en un centro y alumnos que se quedaban sin plaza, nuestra reivindicación era abrir nuevos colegios, como Aldaialde en Zabalgana, ahora no hay listas de espera para matricularse ni en los colegios públicos ni en los concertados”, asegura Errasti.

Por barrios

Este descenso del alumnado, junto a la aplicación del nuevo sistema de admisión hace que Denon Eskola haya detectado algunos desequilibrios, flecos por corregir. “Hay centros en los que el ratio de familias vulnerables es mayor y, entonces, lo que ocurre es que queda hueco en la cuota de no vulnerables. Cada centro tiene su propia casuística, pero sí está siendo complejo el inicio de curso para las familias puesto que es un sistema nuevo para todos”, reconoce Errasti.

El mapa de la escuela pública marca 74 centros en Álava de Educación Primaria y Secundaria. El descenso del alumnado en Vitoria va por barrios, según Errasti. Mientras que en Salburua y Zabalgana todavía se salva la natalidad, en otros distritos como Lakua-Arriaga y Zaramaga cuesta más llenar las aulas.

Una profesora imparte clase en un aula de Educación Primaria. Archivo

En el centro de la ciudad, a pesar de que también es una zona envejecida, el problema se traslada a la red concertada, ya que sus centros educativos se concentran en el corazón de Gasteiz. “El sistema de zonificación de Vitoria suma puntos por la cercanía entre el lugar de residencia y el colegio, con lo que si vives a las afueras de Vitoria y quieres inscribir a tus hijos e hijas en un colegio concertado, pierdes los cinco puntos por zona”, aclara Errasti.

Patios y extraescolares

Denon Eskola continuará este curso trabajando proyectos iniciados con anterioridad, como el de naturalización de los patios escolares, con la ayuda del Ayuntamiento de Vitoria, que ya ha actuado en una docena de centros escolares. “En Denon Eskola pretendemos que la humanización de los espacios de recreo llegue a todas las escuelas de la red pública alavesa”, afirma Errasti.

La coeducación es otro de sus empeños desde hace dos años. “Somos familias implicadas en el desarrollo social y emocional de nuestras criaturas, que nos parece que está un poco descuidado, por eso continuaremos trabajando en este ámbito”, señala.

También son fundamentales para la federación el deporte escolar y las actividades extraescolares, por lo que seguirá ayudando a las AMPA con menos recursos para organizar actividades.