Cerca de 300 personas a título individual, comunidades de vecinos, profesionales del urbanismo, la construcción, el sector energético, juntas administrativas, organizaciones empresariales, universidad, comercios y cooperativas participan hoy en la iniciativa puesta en marcha por el Ayuntamiento de Vitoria para crear comunidades energéticas.

A través de este proceso de asesoramiento y capacitación, el Ayuntamiento quiere dotar a las personas interesadas de la información y herramientas necesarias para impulsar comunidades energéticas en los barrios, que sumen en su objetivo de transición energética segura, justa e inclusiva.

Visto el potencial de las comunidades energéticas para contribuir de manera significativa en la lucha contra el cambio climático, así como a la reducción de la pobreza energética y, dado el escaso desarrollo que este tipo de organizaciones tienen en la ciudad, el Ayuntamiento veía fundamental dar las claves como punto de partida.

Primeros pasos en Ariznabarra

Además, se está trabajando ya en proyectos concretos con comunidades ya concienciadas como, por ejemplo, con vecinos y vecinas de Ariznabarra. También en esa línea y, fruto del acuerdo del gobierno municipal con Elkarrekin, los centros cívicos de Hegoalde, Ariznabarra, la escuela infantil Lourdes Lejarreta, el polideportivo de Aranalde y el bizan Ariznabarra producirán el 33% de la energía eléctrica que consumen a través de la instalación de placas fotovoltaicas en esos cinco edificios municipales.

El empuje para la creación de comunidades energéticas en el municipio está enmarcado dentro de una estrategia más general y ambiciosa. El Ayuntamiento se adhirió al Pacto de las Alcaldías en Europa para el cumplimiento y mejora de los objetivos europeos en materia de clima y energía y ratificó su adhesión en 2020 comprometiéndose a reducir en un 40% sus emisiones de gases de efecto invernadero para 2030, si bien actualmente se está estudiando un objetivo más ambicioso, en torno al 60%.

También la ciudad aspira a convertirse en una de las cien primeras urbes europeas neutras en carbono, formar parte de una de las misiones lanzadas por la UE que ayude a acelerar todos los planes y compromisos que Gasteiz ha ido adquiriendo en ese compromiso en la lucha contra el cambio climático.