Belén Esteban se ha derrumbado este miércoles en Sálvame y se ha quedado al borde de las lágrimas cuando le han comunicado una noticia bomba que acababa de confirmar su compañero Kiko Hernández. El presentador, Jorge Javier Vázquez, ya había advertido a la madrileña de que, aunque la exclusiva no le afectaba a ella, iba a querer marcharse a casa.

Y así fue. Cuando le explicaron, fuera de micrófono, la noticia, Belén Esteban cambió el gesto y pareció que iba a ponerse a llorar. "Me da muchísima pena, estoy flipando, en mi vida pensaba... os lo juro. Estoy ahora mismo que no me lo creo", balbuceaba la colaboradora, que añadió. "Su vida se va a derrumbar, no lo va a superar. Es una putada. No se lo merece, porque lo ha dado todo, todo".

Enigmáticas palabras porque en el programa se mantenía el secreto el nombre de la persona afectada por la noticia, de la que aseguraban tener seis vídeos que la documentaban. De hecho, dijeron haber requisado el teléfono móvil de Lydia Lozano por si había escuchado la conversación de Kiko Hernández. La propia Lozano también se mostraba impactada. "Estoy muy sorprendida, no me encaja nada. No me encaja en esta persona y sobre todo ahora. No sé, puede que estuviésemos engañados, pero si estábamos engañados, lo ha hecho muy bien".

En las redes sociales no había dudas: la persona por la que sufría Belén Esteban es Anabel Pantoja, muy amiga suya, y el motivo serían unos vídeos que demostrarían una infidelidad de su marido, Omar Sánchez, con la que se casó hace menos de un mes, el 1 de octubre, en La Graciosa (Canarias).