Cuando pensamos en una experiencia que combine aventura, naturaleza y la oportunidad de disfrutar en familia, la ruta de Sarria es una opción perfecta. Este recorrido, ubicado en el concejo del mismo nombre y perteneciente a Zuia, al norte de Álava, presenta un amplio abanico de paisajes que cautivan a quienes allí se acercan.
Por si fuera poco, a su increíble naturaleza se le une su accesibilidad y facilidad para todo tipo de senderistas, algo que siempre es de agradecer y plantea actividades al aire libre para muchas personas.
Un recorrido variopinto
La ruta en Sarria, como hemos mencionado anteriormente, es fácil y accesible, lo que la hace en una elección ideal para familias con niños. A lo largo del recorrido, los senderistas se encontrarán con una variedad de elementos naturales, próximos al Parque Natural del Gorbeia.
El recorrido hasta el menhir de Arlobi, que abarca aproximadamente 14 kilómetros de ida y vuelta, es una excelente forma de mantener a todos activos y conectados con la naturaleza. Hallado hace unos años, representa la riqueza arqueológica del territorio.
Sin embargo, para quienes deseen una opción más corta, el Trampal de Arkarai, un pantano o humedal situado en el valle del río Bayas, el cual está a solo 10 kilómetros de ida y vuelta.
Por lo tanto, durante el recorrido es común ver saltos de agua y riachuelos, junto con el citado río, serpenteando todo el recorrido- Unido a su gran vegetación, no cabe duda de que es un plan muy apetecible para los amantes del senderismo.
Instalaciones cercanas
Una de las ventajas de esta ruta es la infraestructura que la rodea. En La Casa del Parque o Parketxe, los visitantes encontrarán un punto de información que da detalles sobre la ruta, así como documentación sobre la flora y fauna locales.
Para aquellos que se desplazan en coche o autocaravana, hay áreas de estacionamiento disponibles, lo que facilita enormemente el acceso. También se han instalado baños a lo largo del recorrido, para que las familias tengan todas las comodidades necesarias durante su aventura.
Los más pequeños también podrán disfrutar de los columpios ubicados en la zona, donde podrán jugar y divertirse tras una caminata. Las áreas de juego están diseñadas para proporcionar un espacio seguro y divertido, preparadas para ahorrar sustos.
Un entorno educativo
Uno de los aspectos más significativos de esta ruta es su carácter educativo. Los niños no solo se divierten: también aprenden sobre la naturaleza y la biodiversidad.
Un buen ejemplo de ello son las casetas de insectos colocadas a lo largo del camino. Estas estructuras sirven como un recurso excelente para concienciar a los más pequeños en el respeto y cuidado de la biodiversidad, así como de su importancia en el ecosistema.
Por otra parte, el hayedo que podemos hallar, es una perfecta presentación de la fauna y flora local, con sus impresionantes árboles, que invitan a descubrir la naturaleza del entorno.
Consejos para disfrutar de la experiencia
Antes de iniciar la caminata, los visitantes pueden detenerse en La Casa del Parque para recoger un mapa y asegurarse de estar bien informados sobre las diferentes rutas y puntos de interés. Del mismo modo, si vas a adentrarte en la ruta, recuerda estos consejos antes de ir.
Equipo adecuado
El clima en estos días fríos exige abrigo, por lo que se recomienda llevar ropa impermeable y botas de senderismo. También es útil llevar capas para adaptarse a las variaciones de temperatura durante el recorrido.
Horarios y accesos
Es recomendable iniciar las rutas temprano en la mañana para aprovechar la luz natural y evitar las horas de mayor afluencia. Durante la ruta, se pueden encontrar mapas e información adicional sobre las rutas y la fauna.
Respeto por el entorno natural
Al tratarse de una ruta cercana al Parque Natural del Gorbeia, es importante seguir las normas, como evitar salir de los senderos señalizados y no dejar residuos. Cuidar el entorno garantiza que esta joya natural pueda disfrutarse al máximo.