El excomisario José Manuel Villarejo ha justificado que entrase por el garaje de la sede del PP para reunirse "ni se sabe" cuántas veces con María Dolores de Cospedal porque "el trabajo de inteligencia tiene estas cosas" y se hace "de forma discreta", igual que cuando "contactaba con gente próxima al Dáesh en el desierto, camuflado".

Tras declarar durante unas tres horas y media sobre la operación Kitchen, el supuesto espionaje al extesorero del PP Luis Bárcenas, Villarejo ha hecho declaraciones a los medios apostados frente a la Audiencia Nacional, en las que ha reiterado que se intercambió mensajes con el expresidente del Gobierno español Mariano Rajoy sobre este operativo, como ya manifestó en el Congreso recientemente.

Villarejo, que estuvo en prisión preventiva más de tres años, ha ratificado ante el juez esa declaración prestada en la comisión de investigación parlamentaria del caso Kitchen, y ha insistido en que Rajoy tenía "interés personal" en la operación porque eran "cuestiones de Estado".

A preguntas de los periodistas, Villarejo ha apuntado también a la exvicepresidenta del Gobierno Soraya Sáenz de Santamaría quien, dice, se informaba "indirectamente a través de una serie de personas" y, aunque no sabe si le llegó información intervenida a Bárcenas en la operación Kitchen, imagina, según ha indicado, "que como responsable máxima del CNI estaba informada, igual que el presidente del Gobierno".

Con Cospedal, imputada en esta causa, ha afirmado que se reunió "ni se sabe" cuántas veces y que lo hizo "como representante del Gobierno".

Ha señalado que cree que su último encuentro fue días antes de su detención, cuando la exdirigente del PP ocupaba la cartera de ministra de Defensa.

Se reunía, según afirmó la propia Cospedal y su exjefe de gabinete José Luis Ortiz, en su despacho de la sede del PP, adonde entraba por el garaje.

Preguntado por esa forma de acceder al edificio, Villarejo ha indicado: "Por lo mismo que cuando contactaba con gente próxima al Dáesh en el desierto, camuflado. El trabajo de inteligencia tiene estas cosas, que hay que hacerla de forma discreta".

El comisario jubilado ha vuelto a presentarse como un "agente de inteligencia", cuya función era la de "conseguir información" sobre "todo lo que tuviese interés", y ha recalcado que todo su trabajo ha sido "siempre con luz y taquígrafos".

Villarejo, epicentro del caso Tándem, del que dimana esta causa sobre la operación Kitchen, ha sido el encargado de cerrar esta semana de comparecencias en la que el juez también ha escuchado a Cospedal; a su marido, Ignacio López del Hierro; a su exjefe de gabinete José Luis Ortiz; y al exjefe de la UDEF José Luis Olivera, todos imputados.