Ya sea por despiste o como medida de prevención contra el coronavirus, los vitorianos han dicho agur a medias en este primer día en el que se ha puesto fin a la obligatoriedad de las mascarillas en el transporte público, así como en ópticas, ortopedias y centros de audición, tras la aprobación en el BOE del Real Decreto de 19 de abril de 2022 y la estabilización de la situación epidemiológica. Muestra de ello eran las imágenes del interior de tranvías o buses, donde casi la mitad de pasajeros la seguía llevando.

En el tranvía

Aún así, se recomienda que las personas vulnerables o que en ese momento estén pasando por un virus respiratorio no se la quiten en espacios cerrados. Una de estas personas que esta mañana no se la ha retirado ha sido Maite Uncetabarrenetxea, que esperaba al tranvía en la parada del Parlamento en su silla de ruedas. “Voy al HUA ahora y como la necesito allí, prefiero ponérmela, aunque, de todas formas, no me ha acordaba que desde hoy se podían quitar ya en el transporte público”, explicaba esta gasteiztarra.

En imágenes: Primer día ¿sin mascarillas? en el transporte público de Vitoria ALEX LARRETXI

Lo hacía acompañada de su hija Natalia, quien, a diferencia de ella, ha optado por quitársela. “Yo no la llevo porque me parece más cómodo. Estaba deseando que llegara este momento. Habitualmente, ya no la uso en el trabajo, así que...”, reconocía.

Por esa misma razón, alguna que otra vez le ha pasado no poder subirse al tranvía o al bus por no haberse acordado de que ahí sí que era obligatorio esta medida preventiva. “No se me va a hacer raro ver la cara del resto de pasajeros”, añadía.

En el bus

Gloria Abad esperaba la llegada del bus de Tuvisa de la línea 6 en la calle Prado y lo hacía con una mascarilla en su mano para ponérsela en cuanto se tuviera que subir a él. “No me acordaba que desde hoy ya no era obligatorio usarla. No me había dado cuenta. Siempre llevo una en el bolso, por si acaso, ¿pero el que quiere, la puede seguir usando, verdad?”, dudaba. En su caso, ha decidido que continuará poniéndosela en el bus, “como medida de prevención porque dentro de un espacio cerrado, hay más probabilidades de coger el coronavirus”. Algo que hará a menudo porque “uso a diario el bus por motivos de trabajo”.

En imágenes: Primer día sin mascarillas en el transporte de Vitoria Pilar Barco

Pocos metros más allí, en la parada de Tuvisa de la línea 10, Eloy Pérez de Anucita, aguardaba a que llegara el autobús, y lo hacía sin mascarilla, porque como dice, estaba deseando que llegara este día, porque “a mí me agobia. Soy muy propenso al mareo y a mí me incomodaba”. “Uso muy poco el transporte público y vengo con ella, por si acaso, pero sí que me acordaba que desde hoy ya no es necesario. Cuando vi la noticia, pensé que qué casualidad que justo fuera desde el miércoles porque es el único día que voy en bus”, declara.

De hecho, ya dentro del bus, había gente que “la llevaba de adorno”, entre los que la llevaban medio bajada, “como chavalillos, entre los que pensé que para eso que para qué se la ponen, aunque está claro que es para que no les dijeran nada”.

En imágenes: Primer día sin mascarillas en el transporte de Vitoria Pilar Barco

En el taxi

Donde tampoco es necesaria llevarla es en taxis, como el de Iñaki Luis, quien al volante de uno de los estacionados en la parada de la Catedral nueva, reconocía que a él le “da igual llevarla ahora. De hecho, estoy en duda si ponérmela o no”, por lo que si se monta un pasajero que la lleve, también lo hará él. “Esta mañana lo que he hecho es que, si la llevaban, me la he puesto y si no lo hacían, yo tampoco. Como es el primer día, no sé. Yo creo que lo que la gente quiere es tener la opción de quitársela o llevarla, si quiere”, afirmaba.

Lo que no va a quitar es la mampara de protección: “La mayoría la ha quitado porque se le hace incómodo, pero yo la dejo. No me molesta”, detalla. Pero no por lo hace para amortizar la inversión de su instalación: “porque la subvencionaron”

En cualquier caso, donde sí que continuará siendo obligatorio seguir usando mascarillas es al entrar en farmacias, residencias, hospitales y ambulatorios.