Tras publicar hace un par de años su último disco, Zumeta, dedicado al pintor guipuzcoano, Mikel Telleria prepara en la capital alavesa su nuevo álbum, un trabajo inspirado por la figura de Lou Reed (Oroit Lou Reed). Ambas producciones van a tener también su espacio en el concierto que el músico y compositor ofrece este sábado a partir de las 19.30 horas dentro del Fin de Año Musical de Araia. El acceso a la sala Andra Mari es gratuito hasta completar el aforo. Allí, junto a Telleria, estarán Ion Cañaveras (bajo), Luis Angel Telleria (batería), Ibon Díaz (guitarra), Xabier Martínez Otxagabia (violín) y Pablo Ramos (saxo).
A la espera de que se publique su nuevo trabajo, en el concierto el público va a poder escuchar...
–Se va a encontrar con alguna canción de antes, así como con temas de Zumeta, que va a tener una presencia importante. Pero también va a contar con presencia el nuevo disco que estamos cocinando y que está dedicado a Lou Reed. Espero que esté ya terminado para principios del año que viene, pero son canciones que tengo ganas de tocar ya en directo, por lo menos algunas.
José Luis Zumeta y Lou Reed, dos personas muy diferentes para crear música en torno a ellos. ¿Qué le atrae de cada uno?
–A mí la pintura me tira mucho y Zumeta siempre me ha llamado. Para mí era un pintor absolutamente genial y, como persona, tenía unos pensamientos muy interesantes. Por eso pensé en dedicarle un disco entero, un álbum ecléctico, igual que su creación pictórica.
Y de Reed...
–Es un disco con canciones cortadas todas por el mismo patrón, por así decirlo. Es rock de guitarras, jugando, de alguna manera, con los recursos que este hombre tenía a la hora de componer. Estamos ahora cocinando el disco, en plena grabación. La idea era tener el disco para Durango, pero es que en el proceso han surgido hasta nuevas canciones y claro... Va a ser un disco muy al estilo suyo, a lo que decía y a su modo de hacer.
Nuevo trabajo
No es un disco de versiones, que nadie se confunda.
–No, no, son diez canciones nuevas, pero están compuestas jugando con los recursos que él manejaba a la hora de componer. Eso sí, será la gente la que tenga que decidir si hemos acertado o no.
¿Para usted, qué tienen en común?
–Cada uno en su ámbito, para mí son personas de referencia. Esa es la clave. Son personas que me han influido, que han dejado posos en el subconsciente. De la música de Lou Reed me he alimentado, por así decirlo, mucho, igual que de otros, claro. Y en la pintura, igual con Zumeta. Para otras personas, serán otros los referentes. No digo tampoco que para mí sean los únicos, pero sí dos muy importantes.
Como es lógico, los dos discos van a ser diferentes, pero hay una huella común que es la del propio Mikel Telleria. ¿Ese sello cómo es?
–Vengo del folk, pero yo ahora mismo estoy en el rock. En el concierto habrá un guiño a ese pasado, de hecho. Pero el resto es rock. No es trash metal, lógicamente. Es un rock melódico, por decirlo de alguna manera. A partir de ahí, a mí me gusta romper con lo que he hecho antes. No me gusta repetirme o seguir algo que ya he hecho. Quiero tirarme a la piscina y probar cosas nuevas. Me aburre hacer siempre lo mismo, por eso procuro cambiar. Por eso el disco de Zumeta y el de Reed no tienen nada que ver. Este va a ser un disco muy guitarrero, muy setentero. El otro tiene más cosas, más influencias. Yo lo que trato es buscar cosas nuevas y no acomodarme en una línea que sé que funciona.
De nuevo en Araia
No es la primera vez que participa en el Fin de Año Musical de Araia.
–Uff, pero ha pasado ya mucho tiempo de eso (risas). Estuve cuando estaba empezando, aunque ahora casi estoy comenzando de cero otra vez.
Es un ciclo, cuando menos, especial, sobre todo teniendo en cuenta que hay quien piensa que en Álava solo suceden cosas en Vitoria y no en el resto del territorio.
–Hay que valorar lo que es el Fin de Año Musical de Araia. El hecho de que todos los años, la asociación Germán María Landazabal esté ahí al pie del cañón para mí tiene un mérito increíble. Además, estás hablando de una propuesta a la que ha acudido a lo largo de los años gente muy buena. Eso hay que valorarlo, además en una localidad del tamaño de Araia. Hay lugares con más población que no tienen tanta oferta cultural.
Ante el nuevo año, el primer deseo musical será que llegue el nuevo disco y...
–Además de salud, que siempre hay que pedir, en lo musical lo que quiero es dar a conocer este nuevo disco y mover esta música, tocar con el grupo y, sobre todo, disfrutar. Tengo ganas de disfrutar del escenario. Si eso pasa, la gente también lo siente y lo disfruta. Esa sería mi carta al Olentzero (risas).