Álava continúa sumergida en una espiral de calor extremo nada habitual para sus vecinos y vecinas. Una masa de aire cálido pesada que continúa asfixiando al territorio y que deja cifras escalofriantes en los termómetros de puntos como Laudio, que vive sus festejos populares y donde en esta misma semana se han alcanzado los 44 grados en dos ocasiones. Su vecina, Amurrio, que hoy pone el broche final a sus fiestas, tampoco quedaba muy lejos de esa cifra, pues ha rebosado los 42. 

Episodios de temperaturas inusuales este sábado han vuelto a sufrir los alaveses, quienes tratan estos días de combatir los sofocos a base de agua, ropa holgada, sombreros, gafas y crema de sol y, como no, lugares sombríos. Por supuesto, evitando la exposición solar a horas centrales del día, en las que ciudades y pueblos parecen espacios un tanto desérticos.

A lo largo de la jornada el Departamento de Seguridad del Gobierno Vasco extendía la alerta naranja por temperaturas altas extremas en Álava entre la una y las siete de la tarde, ya que los termómetros han llegado a superar la barrera de los 40 grados en algunas partes del territorio. Es más, Álava ha sido el territorio de la CAV más afectado por esa alerta naranja. Y es que Agurain, sin ir más lejos, ha registrado la temperatura máxima de la jornada con 41,5 grados. Pero el municipio de la Llanada Alavesa no ha sido el único, puesto que Kanpezu ha alcanzado los 40,2.

Las mínimas más altas de la pasada madrugada se ha registrado en Zaldiaran (26,7), en Kapildui (25,5) y 25 en la estación de Herrera

De igual forma, pequeños núcleos como Zambrana o Espejo se achicharraron con máximas de 40,5 y 40,1; respectivamente. Así, otras estaciones meteorológicas, como la de Moreda, en Rioja Alavesa, han llegado a los 39 grados de máxima y, tampoco se libraron de la ola de calor puntos de la comarca vitivinícola como Laguardia, donde el mercurio ha llegado a los 41 grados, al igual que en Oion; uno menos en Labastida.

Lo cierto es que el calor también ha caído a plomo en la capital alavesa, donde la escena local deja estos días imágenes de turistas y locales a cubierto en espacios a la sombra o a remojo en las fuentes de la ciudad. Y es que, una vez más, Vitoria ha sufrido los casi 40 grados que marcaban sus termómetros; 39,1, para ser exactos.

En imágenes: Vitoria sufre los estragos de la ola de calor DNA

Por otro lado, destacar que las mínimas más altas de la pasada madrugada se ha registrado en Zaldiaran (26,7), en Kapildui (25,5) y 25 en la estación de Herrera.

De igual forma, se mantiene activado el aviso amarillo por riesgo de incendios forestales para todo Euskadi. Por suerte, no se han registrado llamas en ninguna parcela. Eso sí, durante todo el fin de semana se mantendrá el aviso por riesgo de incendios forestales, debido a estas altas temperaturas y a la baja humedad relativa, según adelantaba Lakua.

Nueva jornada tórrida

Bochorno asegurado también para la jornada del domingo. Aunque hasta ahora se esperaba una ligera bajada de las temperaturas para este domingo, las últimas previsiones han obligado al ramal de Seguridad a elevar el aviso amarillo a alerta naranja en Álava por máximas de 39 grados en el sur y de 38 en el resto del territorio. En este sentido, los meteorólogos prevén máximas de hasta 35 grados en Vitoria –el pico se alcanzará a primeras horas de la tarde– mientras que la mínima se situará en torno a los 17. Asimismo, Euskalmet prevé que mañana sea el último día de esta ola de calor.

Un ambiente más otoñal

El panorama cambiará a partir de este lunes, jornada que trae temperaturas en descenso, lo que se traduce en un respiro para la población alavesa. Según prevé la agencia vasca, para este arranque de semana se espera que las máximas en Gasteiz ronden entre los 23 y 24, dejando así una mínima de 16, en ligero descenso. Asimismo, existe la posibilidad de que asomen chubascos débiles, sobre todo, por la tarde.

Así, la bajada de grados se dará a nivel general en toda Álava y Euskadi y se espera que se prolongue, al menos, hasta el próximo jueves, con la lluvia como acompañante.