Misión cumplida. Gran parte de las opciones del Baskonia de alcanzar el play off pasaban por lograr una victoria en Bolonia y terminar octavo y, aunque con suspense, lo consiguió. No pintaban bien las cosas al descanso, pero los hombres de confianza de Ivanovic apretaron los dientes tras el descanso, se encomendaron a los puntos de Howard y rescataron el triunfo en un epílogo dramático al que llegaron fundidos, con Costello como héroe inesperado.

El Baskonia, que presentó en su quinteto inicial la novedad de Raieste junto a Miller-McIntyre, Marinkovic, Moneke y Kotsar con el objetivo de sostener a Belinelli durante los primeros minutos, tuvo un buen arranque de partido, logrando al menos igualar la intensidad de su rival. El conjunto gasteiztarra, pese a algunos desajustes puntuales, comenzó bien plantado en defensa y anotó con consistencia bajo el aro rival especialmente por medio de las penetraciones de Marinkovic, aunque la Virtus hizo lo propio con Shengelia y Hackett.

Belinelli estuvo discreto hasta que, al sentarse Raieste, pasó por encima de Rogkavopoulos para establecer una primera renta de 17-12. Ajustó rápido Ivanovic devolviendo al griego al banquillo y los alaveses lograron darle la vuelta al marcador y ponerse por delante por primera vez gracias a la aparición de Howard con seis puntos seguidos, aunque la Virtus se llevó el primer cuarto con un triple sobre la bocina de Belinelli (22-21).

Minutos delicados

En la reanudación, Howard siguió enrachado y haciendo daño a la Virtus, que por su parte aprovechó la falta de centímetros atrás del escolta y de Chiozza para atacarles con Hackett y Lundberg, mucho más altos y fuertes. Con este guión, ambos equipos fueron intercambiándose golpes con un marcador corto hasta que, tras el 38-38, llegó un demoledor parcial de 13-0 favorable a los locales.

Los bases azulgranas comenzaron a fallar pases sencillos mientras Ivanovic se desesperaba en la banda, Polonara se sumó a la fiesta anotadora de Lundberg y cuando los tiros no entraron el Baskonia fue incapaz de cerrar el rebote defensivo. Sólo dos acciones de canasta y personal de Moneke evitaron que la brecha fuera aún mayor al descanso (53-44).

Reacción tras el descanso

La segunda mitad, en la que Ivanovic recortó la rotación y apostó por sus hombres de confianza en busca de la remontada, comenzó bien para los intereses alaveses con una acción de 3+1 de Howard con la que arrancó un parcial de 4-10 que acercó al Baskonia. Respondieron Shengelia y Belinelli aprovechando de nuevo el rebote ofensivo y las pérdidas para recuperar la renta de dobles dígitos de la Virtus con el 64-54, pero entonces el guión cambió por completo.

El conjunto azulgrana cerró filas atrás, logró frenar la sangría en el rebote y encontró a un inspirado Miller-McIntyre que con sus explosivas penetraciones comenzó a recortar diferencias, bien escudado también por los puntos de Marinkovic y Howard. La Virtus, con algunos jugadores cargados con faltas, cortocircuitó y el Baskonia logró no sólo volver al partido, sino colocarse con una ventaja 67-73 tras un parcial de 3-19. Un triple de Dobric y otro de Lundberg, por desgracia, despertaron a los italianos de su crisis y dejaron todo abierto para el cuarto decisivo con el 74-75.

En la reanudación y aprovechando la presencia de los suplentes locales sobre el parqué, el Baskonia recuperó su renta de seis puntos y pudo haber puesto aún más tierra de por medio, pero perdonó varias oportunidades de conseguirlo y la Virtus se acercó a un sólo punto con Abass y Polonara (81-82).

Final dramático

Cuando la gasolina se le acababa a los azulgranas, apareció Howard en un último chispazo de magia para anotar ocho puntos seguidos para su equipo y colocar el 83-90 en el marcador a menos de cuatro minutos para el final. Fue entonces cuando se secó la reserva baskonista. A los vitorianos se les nublaron las ideas en ataque, se encomendaron a la individualidad de un Howard exhausto y la Virtus, percutiendo por dentro con Mickey, igualó la contienda (90-90).

Parecía que se escapaba el triunfo cuando, a 30 segundos del final, Costello anotó un palmeo milagroso tras tiro errado de Howard. Mickey pudo igualar desde la personal, pero erró uno de sus tiros libres y Costello no falló los suyos para poner el 91-94. En la última acción, el Baskonia defendió bien, recuperó el balón y Moneke sentenció anotando un segundo tiro libre dramático para completar la gesta.

Estadística de la Virtus Bolonia

Estadística del Baskonia