El Baskonia dejó pasar el pasado martes la primera oportunidad para afianzar su posición dentro del 'play in'.
La ajustada derrota en Belgrado le obliga a seguir remando para acabar, al menos, la primera fase entre los diez primeros. La tropa de Ivanovic afronta hoy una nueva oportunidad para dar un paso de gigante en Kaunas frente al Zalgiris e intentar asegurarse un puesto en los cruces previos a los cuartos de final.
Una victoria en el Zalgirio Arena dejaría el 'play in' a tiro a falta de tres jornadas y en función de los resultados podría llegar a ser suficiente. El conjunto azulgrana alcanzaría los 17 triunfos, una cifra que obligaría al resto de perseguidores a rozar el pleno en estas cuatro jornadas de la primera fase para darle caza.
Es hora de dar la estocada hacia el 'play in'. Mejor hacerlo además en tierras bálticas que esperar. Y es que el final de la primera fase es de lo más sinuoso, habida cuenta de que a la escuadra gasteiztarra aún le queda recibir en el Buesa aún siempre peligroso Efes al alza antes de acabar a domicilio frente al líder Real Madrid y la Virtus Bolonia. Conviene no dejar los deberes para el final y evitar así cualquier tipo de susto.
Además, la visita al conjunto báltico se antoja como el momento propicio para que el Baskonia rompa esa mala racha que lleva a domicilio recientemente.
El cuadro alavés no gana fuera desde el pasado 18 de enero cuando se impuso en Belgrado al Estrella Roja y desde entonces encadena tres derrotas como visitante –Bayern Múnich, tras una prórroga, Fenerbahce y este martes Partizan–.
Pues bien, si hay un sitio donde es algo más asequible sacar un resultado positivo lejos del amparo de su público ese es Kaunas.
Buena prueba de ello, es que el Zalgiris es el tercer peor equipo como local de la Euroliga con un pobre balance de siete victorias y otras tantas derrotas, tan solo por delante del Asvel –4 victorias y 11 derrotas– y el colista Alba Berlín –4 victorias y 12 derrotas–.
Los de Trincheri se la juegan
Eso sí, que presente una trayectoria tan irregular en casa no significa que vaya a ser fácil. Para empezar porque los de Andrea Trincheri apuran sus escasas opciones de colarse en el 'play in'.
Es su última oportunidad. Con 12 triunfos a estas alturas están obligados a hacer pleno en estos cuatro partidos que restan para llegar a los 16, su tope. Cifra con la que parece incluso complicado colarse al final de esta primera fase de la Euroliga entre los diez primeros.
Sin embargo, mientras tengan vida lucharán al máximo por apurar sus posibilidades. Ya se vio este pasado martes ante la Virtus. El conjunto báltico puso fin con su contundente victoria (96-81) ante el cuadro transalpino a su racha de tres derrotas seguidas –Olympiacos en casa y Maccabi y Bayern fuera–.
No están muertos y aún tienen un hilo de esperanza. Por eso, un Baskonia que tiene en duda a Tadas Sedekerskis tras el golpe sufrido en su rodilla izquierda en Belgrado tendrá que poner todos los sentidos. Más tras comprobar también que ha despertado como local.
4 derrotas seguidas en casa
Los datos así lo confirman. El Zalgiris ha ganado cinco de sus últimos seis partidos en casa. Atrás queda esa pésima racha en la que llegó a enlazar cuatro derrotas consecutivas ante su público en el mes de diciembre –Mónaco, Partizan, Barça y Maccabi–.
A continuación, la racha dio un giro de 180 grados y ganaría los cuatro siguientes en casa –Alba, Fenerbahce, Efes y Panathinaikos–.
Victorias de calidad ante rivales algunos de ellos con opciones de clasificarse directamente para la ronda previa a la Final Four. Desde que arrancó este 2024 tan solo el ya citado Olympiacos de Bartzokas ha sido capaz de salir victorioso de Kaunas el pasado 1 de marzo. Después corrigieron ese tropiezo imponiéndose a la Virtus. Cinco victorias de seis partidos este año. Casi un pleno.
El actual Zalgiris poco o nada tiene que ver con el que perdió en su feudo al inicio de curso contra el Valencia o el Asvel. Sorprendente derrota esta última, que hoy en día sería difícil de repetirse. Han espabilado desde entonces y atesoran mimbres para dar un susto a cualquiera.
Trincheri ha perdido para esta jornada a uno de sus bastiones, el interior Roland Smits, pretendido en su día por el Baskonia –11,1 puntos y 4,4 rebotes por partido–, pero aún y todo contará con munición de sobra para hacer daño al Baskonia.
Evans es el líder en la cancha. El director de juego es el faro que guía los pasos de este Zalgiris y un jugador que asume gran parte de la responsabilidad en los momentos calientes.
De momento, el estadounidense promedia 17,2 puntos, 2,8 rebotes, 3,9 asistencias y 1,3 robos para una valoración final de 18,6 créditos. Junto al base estadounidense, también destaca la aportación del pívot Birutis –7,8 puntos y 3,7 rebotes–, el exterior Ulanovas –7,9 puntos, 3,9 rebotes y 2,8 asistencias– y un cuatro abierto con buena mano como Manek que aporta 7,3 puntos y 3,2 rebotes.
El mejor de la Euroliga en Triples
Este último no es el único que destaca con su acierto desde más allá del arco. De hecho, el tiro de tres es el principal peligro de este Zalgiris, estadística en la que es el mejor de la Euroliga con un acierto del 40%.
No es de extrañar este espectacular porcentaje, habida cuenta de que hasta cinco jugadores superan esos registros –Hayes (50%), Giedraitis (45,7%), Evans (45,5%), Sumner (42,2%) y el ya citado Manek (40,6%).
A todo ello hay que añadir que otros tres están cerca de la barrera del 40% –Dimsa (39,6%), Lekavicius (39,1% y el ausente Smits (38,7%). Todos meten desde más allá de los 6,75 metros. Otro ejemplo es lo sucedido con Montilva el pasado martes ante la Virtus. En los 48 segundos que permaneció en pista, el joven lituano lanzó su primer triple del curso y lo anotó. Por tanto, habrá que vigilar su tiro exterior para poder dar la estocada definitiva hacia el 'play in'.
