Los resultados logrados con sus respectivas selecciones en estas primeras ventanas FIBA clasificatorias para el Eurobasket 2025 habrán servido a los jugadores baskonistas para reforzar su autoestima y cargar las pilas de cara al tramo decisivo de la temporada.

Y es que, salvo la Bulgaria de un Codi Miller-McIntyre, que ha estado soberbio a nivel individual, hasta el punto de convertirse en una de las sensaciones de este parón, que presenta un balance de una victoria y una derrota, el resto de combinados nacionales con jugadores azulgranas en sus filas –la Grecia de Rogkavopoulos, la Serbia de Marinkovic y la Estonia de Kotsar y Raieste– han hecho pleno con dos triunfos en otros tantos partidos.

Objetivo cumplido a nivel colectivo. Eso sí, a nivel personal los jugadores del Baskonia presentan claroscuros. Y es que mientras unos han tenido un papel destacado y han jugado bastante, casos de Kotsar y Marinkovic, otros como Raieste y Rogkavopoulos han desempeñado un papel testimonial y su aportación ha sido más bien escasa.

Sander Raieste saluda a su excompañero Rokas Giedraitis antes del Estonia-Lituania FIBA

Rogkavopoulos jugó muy poco

En el caso del griego, en el último partido en el que la selección helena se impuso a Holanda (72-74), tan solo disputó 9:19 minutos en los no estrenaría su casillero de puntos tras fallar el único tiro que intentó, un triple, y tan solo capturaría un rebote para una valoración final de 0 créditos.

En su estreno con el combinado dirigido por Spanoulis no mejoraría mucho sus números pese a jugar el doble (18:28), ya que tan solo anotó 2 puntos con unos discretos porcentajes del 50% (1/2) en tiros de 2 y 0% (0/4) en triples, dio 2 asistencias y robó un balón para repetir una valoración final de 0 créditos.

Rogkavopoulos defiende a Kraag durante el partido entre Países Bajos y Grecia FIBA

Marinkovic, de menos a más

Un mejor papel firmó Vanja Marinkovic con Serbia. El de Belgrado ha ido de menos a más. En el triunfo ante Finlandia (77-61) disputó 21:21 minutos en los que anotó 7 puntos con un 0/4 (0%) en tiros de 2, 1/2 (50%) en triples y 4/6 (66%) en tiros libres, capturó un rebote y dio dos asistencias para una valoración final de 3 créditos. 

El escolta azulgrana mejoraría notablemente su rendimiento este pasado lunes en el triunfo en Georgia (63-76) ya que se fue hasta los 15 puntos –3/4 (75%) en tiros de 2 y 3/6 (50%) en triples– y 2 asistencias para 13 créditos de valoración.

Marinkovic trata de dar un pase, durante el partido entre Serbia y Finlandia FIBA

Kotsar, la cara, Raieste, la cruz

Por su parte, Sander Raieste y Maik Kotsar tuvieron un rendimiento dispar en los dos triunfos de Estonia –Macedonia (69-74) y Lituania (65-59)–. La cara fue para el pívot y al alero le salió cruz.

Y es que este último tan solo anotaría 2 puntos –1/3 (33%) en tiros de 2– en los 7:27 minutos que estuvo en pista en el primer compromiso para una valoración final de 0 créditos y no estrenaría su casillero en el segundo pese a permanecer en pista 28:18 tras fallar su único tiro de 2 y sus dos triples. Al menos, adornaría su asistencia con 5 rebotes, 4 asistencias y 1 robo para 7 créditos de valoración.

Kotsar recibe la felicitación de Treier tras anotar una canasta durante estas ventanas FIBA FIBA

Por último, Maik Kotsar fue el más destacado de los azulgranas en estas ventanas FIBA. El interior ya brilló en el partido en Macedonia donde acabaría con 16 puntos y un notable 58,3% (7/12) en tiros de 2, 5 rebotes, 3 asistencias y 2 robos para una valoración de 14 créditos.

El de Tallin mejoró sus registros en el histórico triunfo logrado ante Lituania ya que acabó con un doble-doble de 11 puntos –4/7 (57,1%)– y 13 rebotes (7+6). Además completaría sus estadísticas con 1 asistencia y 1 robo, lo que le permitió acabar con 12 puntos de valoración.

Eso sí, el poste baskonista tuvo un lunar con los tiros libres. Sus porcentajes así lo confirman. La línea de personal fue toda una pesadilla para el pívot estonio ya que en el primer compromiso presentó un pobre 22,2% (2/9) y en el segundo un 30% (3/10).

En total, Kotsar fallaría ¡¡¡14 de los 19 tiros libres que intentó!!! Su escaso porcentaje del 26,3% (5/19) está lejos de los números que presenta esta temporada. Y es que el poste báltico promedia un 72,5% en la Euroliga y un 76,1% en la ACB.