A la ajustada derrota sufrida en Euroliga frente a la Virtus de Bolonia le siguió un duro sopapo en la ACB frente al Barcelona el pasado domingo. El Baskonia, tras encadenar cuatro triunfos consecutivos como local, ha visto frenada bruscamente su buena racha y ahora confía en recuperar su rumbo en Belgrado, el exilio del Maccabi.

El conjunto hebreo ha sido obligado a emigrar de Tel Aviv hasta la capital serbia por el conflicto bélico de su país y recibirá a la escuadra gasteiztarra en la sala Pionir a puerta cerrada.

Al menos, la tropa de Ivanovic se librará en esta ocasión de la presión que ejerce la afición macabea en el Menora Mivtachim Arena, antigua Mano de Elías. La falta del apoyo de su fiel hinchada ha provocado que el cuadro israelí pierda su habitual fortaleza como local.

Brown lanza a canasta ante Kalinic en el duelo ante el Barça en una sala Pionir sin público Euroliga

Buena prueba de ello es que es que de los siete partidos disputados en Belgrado ha ganado cuatro –Bayern (93-90), Fenerbahce (78-73), Alba Berlín (102-81) y Efes (95-86)–, mientras que ha dejado escapar casi la otra mitad tras caer ante Olympiacos (74-79), Barcelona (90-92) y Real Madrid (90-99).

De momento, la escuadra amarilla –como los baskonistas– ha sumado ocho triunfos en este arranque de Euroliga, por lo que el Baskonia buscará un triunfo que le sirva para romper su racha de dos derrotas seguidas y de paso asentarse en la zona de la tabla, a la vez que se deja atrás a un rival directo.

Eso sí, el objetivo no será sencillo. El conjunto vitoriano afrontará el duelo ante el Maccabi de nuevo sin Costello, quien se pierde su séptimo partido tras el esguince de tobillo sufrido en Badalona frente al Joventut y con el problema que supone la falta de un recambio de garantías para Miller-McIntyre en el puesto de base ante las escasas prestaciones mostradas hasta la fecha por sus dos relevos, un Mannion que tiene pie y medio fuera, y Chiozza.

El Maccabi, por su parte, mantiene la duda de John DiBartolomeo, que podría dejar tocado su potente juego exterior donde destacan Lorenzo Brown –15,3 puntos y 6,7 asistencias–, el exbaskonista Baldwin –14,1 puntos y 4,8 asistencias– y Colson –13,4 puntos y 6,3 rebotes–.

Además del peligro exterior, Josh Nebo –9,3 puntos y 6,2 rebotes– y el ex del Valencia Basket Jasiel Rivero –7,8 puntos y 2,9 rebotes– amenazarán la tocada pintura baskonista con su capacidad reboteadora y movilidad, algo que pondrá a prueba a Kotsar, Sedekerskis y Moneke.

Recuperar el acierto desde la línea de tres –un discreto 32% ante el Barça– será clave para un Baskonia que no vence como visitante al Maccabi desde 2018 gracias a aquel mate de Vincent Poirier en la recta final del choque. – B. Lazkano