Las imágenes que se han visto este jueves ante la hornacina de la Virgen Blanca son de esas que no se olvidan, repletas de sentimiento y de pasión por una ciudad y sus valores.

Frente a la imagen de la patrona de Vitoria han desfilado cientos de blusas y neskas, guardando las medidas de seguridad sanitaria pertinentes, para rendirla pleitesía, generando postales como las que se vivían antes de que la pandemia mundial reinase en el planeta entero.