El Deportivo Alavés regresa del parón de Navidades y sus respectivas vacaciones con muchos deberes por hacer. El primero de ellos, que además resulta más factible debido a disponer de tiempo suficiente, es integrar la idea de Coudet en las entrañas del vestuario babazorro.
Pero otra tarea pendiente de enorme trascendencia consiste en recuperar el colmillo ante los rivales directos, ya que el balance frente a estos equipos no es precisamente favorable para los intereses vitorianos.
El Deportivo Alavés tan solo ha sumado dos puntos de 18 posibles ante los cinco rivales con los que se encuentra en la lucha por la permanencia
El Glorioso ha dejado de ser un equipo fiable contra los equipos de la zona baja. Esta dificultad para imponerse a los rivales directos aumenta la preocupación en el seno del Paseo de Cervantes, pues, si algo caracterizó al Alavés en el pasado ejercicio, fue precisamente su consistencia ante equipos de la zona baja con los que competía, en principio, por la permanencia.
31 puntos de los 46 totales se lograron ante los rivales que le sucedían en la tabla, por lo que el margen de mejora en esta faceta resulta enorme para el equipo de Coudet.
El Deportivo Alavés tan solo ha sumado dos puntos de 18 posibles ante los cinco rivales con los que se encuentra en la lucha por la permanencia. Valladolid, Valencia, Espanyol, Getafe y Leganés son los únicos equipos de la competición que no han superado la barrera de los 20 puntos antes de enero. El conjunto babazorro no ha sido capaz de derrotar a ninguno de los equipos anteriormente mencionados.
De hecho, el Alavés sufrió derrotas ante el Espanyol, Getafe y Valladolid, esta última especialmente dolorosa, al tratarse de un encuentro en el que el equipo de Luis García llegó a adelantarse en primera instancia en Mendizorroza, y que estaba señalado como una oportunidad idónea para asestar un golpe a un rival directo evidente.
Valencia y Leganés son los únicos rivales de la zona baja de la clasificación ante los que el Deportivo Alavés ha conseguido sumar algún punto
Son puntos que el conjunto babazorro ha dejado escapar de manera sistemática en la primera vuelta y que ahora obligan al equipo dirigido por el Chacho a minimizar los errores en la segunda mitad del campeonato para alcanzar la permanencia.
Valencia y Leganés son los únicos rivales de la zona baja de la clasificación ante los que el Deportivo Alavés ha conseguido sumar algún punto. Sin embargo, ambos empates resultan insuficientes, dado el estado de necesidad de un equipo que no termina de mostrarse fiable ante sus rivales directos.
Contra el Valencia, el Glorioso llegó a adelantarse en dos ocasiones, pero no fue capaz de controlar el ritmo en los instantes finales para certificar la que hubiera sido una victoria vital en la lucha por la permanencia.
La losa de los goles encajados
Otro aspecto que constituye una losa pesada para el Deportivo Alavés es la gran cantidad de goles encajados. Tan solo el Valladolid, colista, ha recibido más goles en contra (37) que el conjunto vitoriano (30).
En la temporada pasada, el Glorioso fue, en líneas generales, un rival difícil de batir; justo lo contrario a la sensación que transmite en la actualidad, donde parece desmoronarse ante cualquier aproximación ofensiva del adversario.
En concreto, el Alavés ha recibido un total de diez goles ante los cuatro equipos que están por debajo en la clasificación. Es decir, un tercio del total encajado ha llegado frente a contrincantes con los que, a priori, no debería fallar.
El equipo vitoriano ha sido incapaz de dejar la portería a cero ante Getafe, Espanyol, Valencia y Valladolid, lo que evidencia la necesidad de mejorar de forma significativa en esta faceta del juego.
A todo ello se suman otras adversidades que el Deportivo Alavés ha enfrentado durante la primera vuelta del campeonato, aunque todavía queda el choque frente al Girona para cerrar el ecuador del curso.
El Glorioso no ha tenido fortuna con las decisiones arbitrales y ha recibido un penalti en contra ante los cuatro equipos que le preceden en la tabla
Además de su inconsistencia defensiva, el Glorioso tampoco ha tenido fortuna con las decisiones arbitrales, que, en ocasiones, deciden el devenir de los encuentros. El Alavés ha recibido un penalti en contra ante los cuatro equipos que están en peor situación clasificatoria.
Algunos de ellos, como el señalado frente al Valladolid, han sido especialmente polémicos, perjudicando claramente a los intereses babazorros debido a una disparidad evidente en el criterio arbitral.