Lejos de Mendizorroza hace frío, aunque la mayoría de veces el termómetro diga lo contrario. Así lo han comprobado multitud de futbolistas que, aun estando a gusto y ser muy valorados en el Deportivo Alavés, apostaron por marcharse a destinos de teórico mayor caché; y también algunas leyendas que abandonaron Vitoria-Gasteiz al ver terminado su ciclo, como es el caso de Fernando Pacheco, ahora mismo propiedad del Espanyol

Más de dos años después de su marcha, el Glorioso se reencontrará este sábado (16.15 horas) con el pacense, cuando visite el RCDE Stadium para disputar la quinta jornada; pero lo hará en unas condiciones extremadamente diferentes a las del momento de su despedida. Buena muestra de ello es que, quien llegó a ser en sus filas uno de los mejores porteros de la Liga, hoy en día es suplente. Además, no se trata de una condición reciente.  

Actualmente, Pacheco, de todavía 32 años –la supuesta mejor edad para los de su posición–, está a la sombra de Joan García. Un joven guardameta (23) formado en las categorías inferiores del club perico que, desde el curso pasado, está haciéndose un nombre en el fútbol español. No solo por sus grandes actuaciones bajo la meta blanquiazul, sino también por su medalla de oro en los Juegos Olímpicos de este verano, pese a que no jugó.

La irrupción de García, eso sí, ocurrió de casualidad. Pacheco, titular indiscutible a lo largo de las 28 primeras jornadas, tuvo que ausentarse de un partido frente al Huesca por problemas físicos y tanto Luis Miguel Ramis, despedido semanas más tarde, como Manolo González optaron por dar continuidad al canterano a partir de ese momento. Este último, cabe mencionar, ya partía con tal predisposición al haberlo tenido a sus órdenes en el filial.

El portero barcelonés no desaprovechó la oportunidad, siendo pieza clave en la recta final de una campaña 2023-24 que terminó con el ascenso del Espanyol a Primera División, y así dejó sin opciones a un Pacheco que volvió al ostracismo que ya había vivido en el Almería. Allí, al club indálico, llegó inmediatamente después de descender con el Alavés y tuvo que salir a los pocos meses debido a la nula confianza que le demostraron en todo momento. 

Ya en la élite, García ha demostrado la misma seguridad que en la categoría de plata, por lo que, salvo contratiempo, nada apunta a que la situación del pacense vaya a cambiar. Ahora bien, estuvo cerca de hacerlo. El Arsenal, durante los últimos días del reciente mercado estival, se mostró dispuesto a pagar la cláusula de 30 millones del canterano perico, lo que habría devuelto a Pacheco a la deseada primera línea, pero finalmente no lo hizo.

SIVERA, EL NUEVO GUARDÍAN

La situación de Fernando Pacheco, de todas formas, no es la única que ha cambiado desde que acabó su etapa en Mendizorroza. Por aquel entonces, el Alavés tenía por delante el exigente reto de encontrar reemplazo a uno de los mejores porteros de su historia, necesidad que hoy ya no existe. Aunque había dudas sobre su figura, el club gasteiztarra eligió a Antonio Sivera –eterno suplente– y la apuesta, visto lo visto, no le ha podido salir mejor

En la actualidad, el de Jávea está entre los guardametas más decisivos tanto de LaLiga como, probablemente, de Europa y lo mejor es que aún no ha tocado techo. Tanto es así que, si continúa por esta línea, el seleccionador nacional, Luis de la Fuente, no tendrá razones para no incluirle en sus próximas listas. Algo que, por cierto, también llegó a merecer –y no fue recompensado– el propio Pacheco en varios momentos como babazorro.

Durante su estancia en Mendizorroza, de nada menos que siete temporadas consecutivas, Pacheco defendió la portería del Glorioso en 253 ocasiones –251 de ellas como titular–. Fue clave en el histórico ascenso a Primera del 2016, con José Bordalás en el banquillo; y aún sigue siendo el futbolista que mayor número de veces ha jugado con la zamarra albiazul en la élite, habiendo alcanzado los 208 encuentros.