Vuelven las matemáticas para el final de la presente temporada y eso es sintomático de que el Alavés se encuentra en una situación de extrema necesidad. Si bien los argumentos en lo estrictamente futbolístico no son para nada optimistas, en el apartado de los cálculos las sensaciones tampoco invitan a la ilusión. El Alavés continúa penúltimo con tan solo 17 puntos, su peor cifra desde el regreso a Primera.
Dado que el equipo vitoriano no está logrando resultados que propicien un cambio de dinámica, la principal preocupación reside, además, en que el resto de los rivales directos de la zona baja están yendo hacia arriba. Obviando la pésima temporada del Levante y también del Cádiz -ambos vecinos del Glorioso en los puestos de descenso-, tan solo el Mallorca está bajando en el nivel de sus prestaciones, si bien viene de sumar tres nuevos puntos ante los gaditanos.
El resto de los teóricos rivales en la pugna por la permanencia como Elche y Getafe se encuentran, sin embargo, en sus mejores momentos del curso. Esto mismo, por tanto, podría provocar que cuatro equipos se jueguen, a lo sumo, las tres plazas de descenso. De momento la distancia respecto a la zona tranquila es de dos victorias. Seis puntos respecto al Mallorca, el último equipo que delimita la permanencia.
UN PACIENTE CRÓNICO
No en vano, este crudo contexto en el que se encuentra el Alavés no deja de evidenciar la mala dinámica en la que se encuentra sumida la plantilla. Es cierto que en el mercado invernal el cuadro albiazul se ha visto reforzado, pero hasta que el Glorioso no se vio con la soga al cuello no se ha reforzado el grupo por parte de la dirección deportiva. Quizá sea demasiado tarde. Porque la deriva de esta temporada no es para nada puntual, es algo crónico que arrastra el club desde hace dos años.
De hecho, son tres temporadas consecutivas las que el cuadro babazorro lleva coqueteando directamente con el descenso. En las anteriores se salvó gracias a los deméritos ajenos y al milagro Calleja. Sin embargo, el Alavés también se encontraba en una mejor situación de puntos que a día de hoy.
Y es que la temporada 2021-22 está batiendo récords para mal. Desde el regreso a la élite, este es el curso en el que el Glorioso menos puntos acumula antes de disputarse la 24ª jornada, en concreto un total de 17.
Por poner en perspectiva, el conjunto gasteiztarra acumulaba 22 puntos en la pasada temporada a estas mismas alturas y hace dos campañas otros 27. De hecho, esta involución del Alavés está directamente relacionada con el poscovid.
Desde que se retomó la competición tras el parón por la pandemia, el Alavés no ha evolucionado en ninguno de los apartados deportivos. Hasta seis entrenadores se han sentado en el banquillo de Mendizorroza sin haber conseguido un mínimo de estabilidad.
Aun así, retomando las cábalas a las que la parroquia albiazul se podría aferrar para soñar con la salvación, la realidad es que el Alavés tiene que lograr, como mínimo, siete victorias en los 15 partidos restantes. De hecho, la permanencia del pasado curso se situó en 36 puntos, dos menos que la cifra (38) con la que el Alavés cerró la pasada temporada.
Además, desde la campaña 2018-19 la permanencia ha sido cada vez más barata. En aquel entonces el Celta firmó la permanencia con 41 puntos, en la 2019-20 también la finiquitó el cuadro gallego con 37 y en el Elche certificó el objetivo el ejercicio anterior con 36 puntos.
De todas formas, de nada vale fijarse en lo que hagan el resto de los equipos si el Alavés no realiza sus deberes. Tras un enero decepcionante y tres meses ya sin saborear ninguna victoria, los pupilos de Mendilibar tienen que revertir la situación cuanto antes.
La reacción ha de ser inmediata, pero no es un calendario sencillo el que afrontan los gasteiztarras. Durante el mes de febrero el Glorioso se enfrentará al Valencia en Mendizorroza y afrontará luego dos salidas seguidas ante el Real Madrid y el Getafe. Evidentemente, rivales de enjundia para intentar poner fin a una racha de once duelos sin conocer el dulce sabor de la victoria.
17
La temporada 2021-22 está siendo muy negativa para el Deportivo Alavés. Tras haberse disputado 23 jornadas en LaLiga, el conjunto babazorro -primero dirigido por Javi Calleja y, actualmente, bajo las órdenes de José Luis Mendilibar- ha sumado únicamente 17 puntos. Esto es, se trata de la cifra más baja obtenida por los vitorianos a estas alturas del curso desde que regresaron a Primera División en la campaña 2015-16-.
Puntos tras la jornada 23
La involución que han sufrido los vitorianos está muy relacionada con la era poscovid, en la cual ya se ha condenado a cinco técnicos
