- Los países de la Unión Europea están decididos a dar un nuevo impulso a la protección de sus fronteras y a la lucha contra el extremismo después de los últimos ataques ocurridos en Francia y Austria, que han vuelto a poner el terrorismo en lo más alto de la agenda política.

Ayer viernes, los ministros de Interior de la UE participaron en una videoconferencia en la que adoptaron una declaración que condena los ataques y subraya la “unidad y solidaridad” de los países en esa lucha.

“Es una señal fuerte de que estamos juntos en esto”, dijo en rueda de prensa el ministro alemán de Interior, Horst Seehofer, cuyo país preside el Consejo de la UE este semestre.

El objetivo es completar las medidas en las que ya se ha empezado a trabajar, pero además poner en marcha otras nuevas, por ejemplo en el ámbito de las comunicaciones encriptadas que utilizan los terroristas.

Por su parte, la comisaria europea de Interior, Ylva Johansson, anunció que tiene previsto presentar el próximo 9 de diciembre una nueva agenda contra el terrorismo en la UE.

A finales de noviembre, añadió la comisaria, se celebrará el primer foro para hablar de cómo reforzar el espacio de libre circulación Schengen y en mayo de 2021 Bruselas propondrá una estrategia en ese sentido.

La declaración incide en el “largo camino” que han tenido que recorrer los países europeos hasta reconocer la libertad de religión y subraya la necesidad de combatir, a través del Estado de derecho, los intentos extremistas de destruir este principio.

Fuentes del Ministerio español de Interior admitieron que el borrador inicial incluía una referencia explícita al islam, que finalmente no figura en el texto adoptado, porque España y otros países creyeron preferible que no apareciera. El objetivo, dijeron las fuentes, es luchar contra cualquier tipo de terrorismo y dejar claro el respeto a todas las religiones.

La declaración dice textualmente: “Nuestra lucha contra el terrorismo no se dirige contra ninguna creencia religiosa o política, sino contra el extremismo fanático y violento”.

“Hay que optimizar la protección de nuestras fronteras externas, tenemos que saber quién entra y quién sale”, tiene que haber más intercambios entre los países sobre esos datos y de los desplazamientos en la UE, señaló por su parte el ministro alemán.

Los ministros incluyeron un apartado específico para subrayar la necesidad de intercambiar datos sobre personas que supongan una amenaza terrorista, dado que muchos de los atacantes de los últimos años eran ya conocidos por las autoridades de algunos de los países.

Los ministros hacen hincapié en la urgencia de impulsar reformas que no acaban de aplicarse, como es el caso de medidas más severas contra el contrabando de armas de fuego o la obligación a las plataformas online de retirar en menos de una hora los contenidos de odio y violencia que pueden llevar a radicalizaciones, colgados en la red por extremistas.