La edición emitida este jueves de Dúos Increíbles, el concurso musical que aúna a cantantes séniors y júniors en La 1, enfrentaba a las cuatro mejores parejas, de las que debía quedar una eliminada. Pero más allá de la competición, se vivió quizá el momento más emotivo del programa y que no fue sino una lección de compañerismo ante el problema sufrido en directo por un compañero y rival.
Se encontraban en el escenario Antonio Carmona y Carlos Goñi interpretando la canción El lado oscuro, de Jarabe de palo. En el programa intentan hacer versiones muy diferentes de las canciones, con ritmos distintos, y en plena actuación el líder de Revólver se perdió con los compases y se quedó en blanco, teniendo que paralizarse el show. El rockero valenciano estaba al borde las lágrimas ante algo tan poco habitual para él, pero en ese momento subió rápidamente al escenario para arroparlo Sole Giménez.
La excantante de Presuntos Implicados, amiga personal de Goñi desde hace décadas, era rival en el programa, ya que ambos se estaban jugando pasar de fase o quedar eliminados, pero se olvidó de la competición para tranquilizar al cantante. “Esto es un directo pero podemos parar. No te preocupes, cariño, no pasa nada, tío. Estamos aquí todos para apoyarnos los unos a los otros”, le dijo mientras le abrazaba. “Lo importante es la música, tú disfrútala y ya está. ¡Venga, por Pau!”, añadió, animándole a reiniciar la actuación.
“Eres una crack”, le respondió Goñi, que poco después explicaba lo que le pasó. “En la música que estábamos haciendo hay una serie de compases y de cosas que hacen que yo tenga que ir con mucho cuidado, y hoy he tropezado”, analizó, pero sacó lo bueno de ese momento difícil. “Me he sentido protegido y me he sentido cuidado. Hoy en día no sé cuánta gente puede decir eso. Estoy en un momento de mi vida en el que estoy extraordinariamente rodeado, mire a donde mire. Y Sole es una de las personas a las que más quiero en este mundo, porque somos amigos desde hace 35 años y me conoce muy bien".
Carmona y Goñi repitieron la canción desde el principio y no sólo les salió bien, sino que fue la única batalla que su equipo (compuesto también por Nia y el navarro Paul Alone) ganó a sus rivales (Sole Giménez, Miguel Poveda, Anonio José y Yoli Saa), aunque no les sirvió para evitar que los eliminados fueran dos de ellos: el propio Carlos Goñi y Paul Alone, que habían formado uno de los dúos más compenetrados desde el inicio del concurso.