La ministra de Igualdad, Irene Montero, ha acusado este miércoles al PP de "promover la cultura de la violación que pone en cuestión la credibilidad de las víctimas", poniendo como ejemplo las campañas contra la violencia de género que los gobiernos 'populares' han puesto en marcha en comunidades autónomas como Galicia o la Comunidad de Madrid.

Estas declaraciones han provocado las protestas del grupo parlamentario durante varios minutos y la intervención de la portavoz del mismo en la Cámara baja, Cuca Gamarra, para calificar de "altamente ofensiva" la declaración de la ministra.

"Quiero dejar claro que es altamente ofensivo que una dirigente y una representante política que tiene, nada más y nada menos, que la responsabilidad de dirigir las políticas de Igualdad esté vertiendo estas afirmaciones en relación a un partido que ha luchado y va a seguir luchando por la igualdad en este país", ha apuntado Gamarra.

"Entonces ustedes, ¿cómo llaman a decirle a una mujer que vigile su copa en lugar de poner el foco en el agresor?", ha cuestionado Montero en respuesta a la dirigente 'popular'.

Ante este episodio, la propia presidenta del Congreso, la socialista Meritxell Batet, ha reprochado a la ministra que sus declaraciones no son "adecuadas" para el Parlamento y ha pedido, en general a los presentes en el Hemiciclo "contención en el mensaje". "Debemos querer contribuir a la convivencia en la Cámara", ha señalado.