Alcanzado el ecuador de la temporada navideña, los mercados continúan animando las calles más emblemáticas de Vitoria-Gasteiz, convirtiéndolas en puntos de encuentro marcados por la artesanía y el trasiego constante de curiosos y compradores. Entre ellos, además del que se ubica en pleno corazón del Parque de La Florida, destacan los ubicados en la Plaza de los Celedones de Oro y en la calle Independencia, dos enclaves estratégicos y de paso obligado para los gasteiztarras durante estas fechas.

Lorena López, de Ginkho 33 Alex Larretxi

Uno de estos puestos lo regenta Lorena López, fundadora de la marca Ginkho 33, dedicada a la producción de artesanía elaborada en Alicante y presente desde hace ocho años en el Mercado de Navidad de Vitoria. “Trabajamos de forma artesanal, con cueros de la zona, contribuyendo al pequeño comercio. Además de ponerle pasión, siempre buscamos ese toque de color y unos valores ligados a seguir luchando por lo bueno y lo diferente”, explica con su habitual amabilidad.

“El balance de Navidad va en la línea, nunca se sabe realmente hasta el último día”

Lorena López - Ginkho 33

En cuanto al balance de la campaña navideña, López considera que “va en la línea”, si bien matiza que “nunca se sabe realmente hasta el último día”. Aun así, subraya que “todo es cuestión de actitud. Aunque haya un día malo o se tuerzan las cosas, o tienes actitud o no funciona”.

Lidia Fernández, de Nopal Alex Larretxi

Respecto a los puestos ubicados en la confluencia entre la calle Independencia y la Plaza de los Celedones de Oro, López afirma que la mejora es notable respecto a años anteriores. “Las vidrieras son espectaculares, el confort, la calefacciónEs algo muy bueno, tanto para nosotros como para el cliente”, señala. A su juicio, se trata de “un mercado muy atractivo”, ya que ofrece productos “que no se ven en otras partes de España”.

De flores a joyas

Otro de los puestos con mayor encanto del mercado navideño es el de ‘Nopal’, de la granadina Lidia Fernández, que elabora artesanía a partir de plantas y flores naturales. “El balance es positivo”, asegura. “Siempre repito porque el público de aquí valora mucho mi trabajo y la artesanía. Es un público muy amable y muy entregado”, destaca sobre la ciudadanía gasteiztarra.

Eso sí, la elaboración de sus joyas no es sencilla y conlleva una elaboración cuidada hasta el último detalle. “Es un proceso delicado, porque recojo la flor en una fase de floración temprana. Son joyas muy pequeñas, pero el proceso es muy bonito”, explica. No en vano, Fernández acumula 16 años de trayectoria como artesana, de los cuales la mitad los ha pasado participando en el mercado navideño de Vitoria-Gasteiz.

“El mercado de Navidad de Vitoria es atractivo; hay productos que no se ven en otras partes”

Lidia Fernández - Nopal

El taller Awa BCN, de Digna Reyes, es, sin duda, uno de los más sorprendentes que se pueden visitar en el mercado navideño de la capital alavesa. Este es el tercer año consecutivo en el que la artista, afincada en Barcelona, acude a Vitoria-Gasteiz, y en esta ocasión lo hace con una colección de joyas en titanio anodizado, “muy bien recibida” por su clientela.

Balance positivo

Nos quedan diez días para cerrar la campaña y, en mi caso, el balance es bastante bueno”, señala. “Llevo varios años viniendo y ya tengo una clientela fiel que cada año se acerca a ver qué traigo nuevo. A veces incluso me traen piezas porque quieren una igual”, añade, satisfecha, sobre el desarrollo de la temporada de Navidad en Gasteiz.

Digna Reyes, de Awa BCN Alex Larretxi

En su caso, cuenta con clientes que saben que es durante estas fechas cuando se instala en Vitoria y donde pueden ojear –y comprar– las últimas novedades elaboradas en su taller. “Hay gente que me escribe antes de la feria para preguntarme si voy a venir. A veces me voy a Madrid y me preguntan si estaré aquí. Cuando les digo que sí, ya saben que me encontrarán en el mercado”, rememora agradecida.

“Hay gente que me escribe antes de la feria para saber si voy a venir, mi joyería es especial”

Digna Reyes - Awa BCN

Reyes explica que su joyería no es para todos los públicos y que es “un poco especial”, ya que utiliza procesos técnicos de coloración mediante electrólisis. “Hay gente a la que le encanta y gente a la que no, porque es mucho color, pero en cualquier caso son piezas únicas”, apunta. De hecho, suele vender en Vitoria las piezas más elaboradas y trabajadas de su colección.

Así las cosas, en los puestos del mercado navideño ubicados en la Plaza de los Celedones de Oro y la calle Independencia –que permanecerán abiertos hasta el próximo 6 de enero– se pueden encontrar todo tipo de productos artesanales: bisutería, cuero hecho a mano, calendarios y agendas, ropa, joyas, cerámica convertida en anillos y pendientes, lámparas y una amplia variedad de detalles pensados para regalar a los seres queridos durante las Navidades.