El Ayuntamiento de Vitoria continúa sustituyendo el alumbrado público de la ciudad por luces, facilitando así el aumento de la eficiencia energética y la reducción en el consumo de energía eléctrica en alumbrado exterior, "al margen también de los beneficios medioambientales que reporta".
Las intervenciones se realizan con cargo a los presupuestos de 2022 y 2023, sumando ambas partidas casi un millón de euros para cambiar algo más de 2.000 farolas. La primera de las actuaciones, la correspondiente al pasado ejercicio, concluirá a comienzos de octubre, afectado a 915 luminarias de un total de 22 calles (entre ellas, Bekolarra, Avenida de los Huetos, Artapadura, La Peña, Portal de Bergara, Aguirrelanda o Kapelamendi).
La segunda está en contratación para su adjudicación en breve, con lo que los trabajos empezarán a finales de este año o principios del que viene. En este caso, se mejorará el alumbrado público de 33 calles como Fernández de Leceta, Paseo de la Senda, Serafín Ajuria, Avenida Gasteiz, Obispo Ballester o Simón de Anda. En conjunto, se colocarán 1.100 nuevas luminarias.
Con estas dos obras, aproximadamente el 40% de todas las farolas que hay en la ciudad tendrán tecnología LED. Un dato que ha querido destacar la concejala del área y teniente de alcaldesa, Beatriz Artolazabal, que ha asegurado que el Ayuntamiento mantendrá y reforzará esta estrategia que va estrechamente ligada a los Objetivos de Desarrollo Sostenibles, ODS, marcados por la ONU.
“El trabajo por conseguir una ciudad sostenible no puede parar. Debe mantenerse en el tiempo para que podamos recoger los frutos, que no llegan de un día para otro. Queremos una Vitoria-Gasteiz verde, que luche contra el cambio climático y genere las menores emisiones de CO2 posibles. Usar las luces LED en nuestras calles en lugar de las luminarias clásicas permite disminuir la contaminación lumínica y el consumo energético y obtener mejores niveles de iluminación en todo el espacio público”, ha manifestado Artolazabal.