Es una de las programaciones más veteranas dentro de los 25 años de camino del Guggenheim, una propuesta en la que la presencia alavesa siempre ha sido una constante. Sucede lo mismo, por supuesto, en este 2022. Aprendiendo a través del arte-Artea ikasbide pone ahora el broche al trabajo realizado este curso y lo hace con una exposición colectiva que se puede ver en el museo bilbaíno hasta el próximo 18 de septiembre.

Un momento de trabajo en el Miguel de Cervantes. | FOTO: CEDIDA

En el caso del territorio alavés, dos son los centros escolares que han tomado parte. Por un lado, el alumnado de 5º curso del Colegio Miguel de Cervantes tenía como misión fomentar el respeto y la inclusión en la clase, aprendiendo de la diversidad cultural existente en el grupo. La artista vitoriana Nerea Lekuona les guió “en un fascinante proceso de trabajo individual y colectivo”, según explican desde Guggenheim. En primer lugar, los escolares acudieron a clase ataviados con una prenda u objeto típico de su país de origen, y después trabajaron conjuntamente para crear una instalación, Bakeleku, que sirviera de refugio para las familias desplazadas de la guerra de Ucrania.

Por su parte, los niños de 4º, 5º y 6º curso del Colegio Samaniego imaginaron un mundo ideal, de la mano del también artista gasteiztarra Ibon Sáenz de Olazagoitia. Debatieron sobre el significado de utopía e investigaron desde su entorno más cercano hasta el más lejano del planeta. Plasmaron las distintas especulaciones sobre ese mundo futuro en frases que introdujeron en “galletas de la suerte” de arcilla. Los escolares dibujaron también medios de transporte utópicos, banderas o monedas del futuro. l