vitoria - A las doce de la noche del domingo concluía el plazo estipulado por la ACB para que los jugadores sujetos al derecho de tanteo por sus respectivos clubes presentasen una oferta cualificada. En el caso del Baskonia eran cuatro los que se encontraban en este situación: Bourousis, Mike James, Darius Adams y Fabien Causeur. Como quiera que los dos primeros ya se habían comprometido oficialmente con el Panathinaikos griego, la atención se centraba en el base de Decatur y el escolta francés. Pues bien, el tiempo se consumió sin que se registrase novedad alguna, lo que quiere decir que sus derechos continúan perteneciendo a la entidad vitoriana y que, en el caso de que sigan jugando en la ACB, lo harán en el Baskonia. Al menos en teoría. Porque lo cierto es que una vez acabado el derecho de tanteo, arrancan las negociaciones directas.
Y bajo este formato sí que pueden producirse novedades en la entidad azulgrana. Especialmente en el caso de Adams. Aunque todavía permanece en Estados Unidos apurando sus opciones de encontrar acomodo en la NBA, su cartel permanece muy alto en Europa y más aún en la propia ACB, donde su recién adquirido pasaporte búlgaro le concede un plus muy valioso. Una situación que le coloca en el punto de mira de un grande como el Barcelona.
El club blaugrana no cuenta con Carlos Arroyo y ha perdido a Satoransky -además ayer se confirmó la marcha también de Abrines a la NBA-, por lo que como mínimo debe incorporar dos directores de juego para el próximo curso. Una de sus opciones es Adams, aunque para ello deberá rascarse el bolsillo. Porque Josean Querejeta no está dispuesto a permitir que un rival directo se refuerce sin pasar por caja. Según el portal de internet Eurohoops, el punto de partida de la negociación estaría en el millón de euros. Entre otras cosas, porque la oferta presentada en la ACB desde el Buesa Arena para poder incluir al estadounidense en el derecho de tanteo es más que jugosa. Aproximadamente tres millones y medio de euros repartidos en tres años de contrato (el último opcional).
A partir de ahí, ambos clubes -o cualquier otro de la ACB (el Madrid también busca base tras la marcha de Sergio Rodríguez) que desee hacerse con sus servicios- están obligados a negociar para tratar de alcanzar un acuerdo. Si no lo alcanzan, Adams tendría que seguir en Vitoria bajo las condiciones ofrecidas o buscar acomodo en cualquier otro equipo fuera de la competición española.
Una situación idéntica a la que se produce en el caso de Causeur, aunque este con bastantes menos posibilidades de negocio para el Baskonia. El escolta galo tiene menos novias en este momento que Adams pero lo que en absoluto es descartable actualmente es que continúe defendiendo la elástica azulgrana. Una opción casi impensable hace apenas unos meses pero que va ganando fuerza con el paso del tiempo. - DNA