Una gran temporada, como la que ha realizado el Deportivo Alavés en su regreso a la máxima categoría, nunca pasa desapercibida para los clubes rivales. Buena muestra de ello es que, pese a que LaLiga concluyó hace solo tres semanas, son varias ya las llamadas que ha recibido Sergio Fernández mostrando interés por alguno de los futbolistas que la entidad albiazul tiene en nómina, entre los que, en esta ocasión, hay que destacar a Carlos Benavídez.

Según Gianluca Di Marzio, reputado periodista italiano de Sky Sports, uno de los nombres que maneja la Fiorentina, de la Serie A, para reforzar su sala de máquinas es, precisamente, el del volante uruguayo, quien está vinculado al Paseo de Cervantes hasta 2026. Benavídez, cabe recordar, renovó con el Glorioso por última vez el verano pasado, gracias a una cláusula de ampliación automática por ascenso a la Primera División.

Durante el curso 2023-24, su segundo como babazorro, Benavídez disputó 29 partidos en Liga y tres en Copa del Rey, para un total de 1.392 minutos. Fue titular, además, en trece ocasiones y estos datos le llevaron a ser el decimoquinto futbolista del Alavés con mayor participación. Ahí le perjudicó el gran nivel tanto de Ander Guevara como de Antonio Blanco en el doble pivote, intocable durante buena parte del ejercicio. 

Luis García Plaza se abraza con Carlos Benavídez tras la reciente victoria contra el Atlético. Efe

CLAVE EN EL EPÍLOGO

El uruguayo, eso sí, fue una de las figuras clave en la gran recta final de campaña que completó la escuadra de Luis García Plaza. ‘Charly’, como le apodan dentro del vestuario, trabajó al máximo en cada entrenamiento para estar preparado el día que el técnico albiazul le diera una oportunidad y ese esfuerzo dio sus frutos ante el Atlético de Madrid, Celta, Valencia, Girona y Getafe. Pudo destapar, incluso, su faceta de goleador.

Esto último, sumado al interés que ha generado en el mercado, podría abrir la puerta a una próxima renovación. Benavídez, además de ser un futbolista muy valorado por Luis García Plaza, es una de las grandes apuestas a medio plazo de Sergio Fernández, siempre pendiente del escaparate sudamericano, y mover ficha para blindarlo no sería descabellado, sobre todo si se tiene en cuenta que todavía, a sus 26 años, no ha tocado techo.

Asimismo, la realidad es que el Alavés, actualmente, no tiene la necesidad imperiosa de vender, al contrario que otros clubes de LaLiga. La entidad babazorra se encuentra en una situación económica relativamente cómoda y, salvo que se le presente la oportunidad de sacar gran rédito, su intención es priorizar el aspecto deportivo. Más aún ahora que, tras varios intentos frustrados, ha logrado construir unos cimientos para seguir creciendo.

Diferentes al de Benavídez, ahora bien, son los casos de Javi López y Abdel Abqar. El tinerfeño y el marroquí, al igual que el charrúa, están siendo tentados por otros equipos para dejar Mendizorroza este mismo verano; pero, dado que acaban contrato en 2025, el Glorioso está obligado a, como mínimo, analizar las ofertas que tiene sobre la mesa. Siempre y cuando, claro está, no consiga renovar a ambos en las próximas semanas.

SU FICHAJE

Carlos Benavídez, cabe recordar, aterrizó hace dos veranos en Vitoria-Gasteiz como uno de los futbolistas clave en la reconstrucción del Alavés en Segunda División. Desde entonces –llegó libre después de acabar su vínculo con Independiente, protagonizado por las lesiones–, ha defendido la elástica albiazul en 68 ocasiones, ha marcado cinco goles y se ha convertido en uno de los grandes líderes del vestuario. 

Le costó adaptarse al fútbol europeo, como le ocurre a la mayoría de jugadores sudamericanos, pero este año ha dado varios pasos hacia adelante en ese sentido. Mucho le ha ayudado en ello, según admitió el propio uruguayo en su entrevista con este periódico, el trabajo con el psicólogo Emilio Ibáñez. Aunque mantiene su esencia canchera, su control de las revoluciones le ha ayudado a no ser tan amonestado por los árbitros españoles.