Carlos Benavídez está inmerso en su segunda temporada en las filas del Deportivo Alavés, donde busca asentarse en la Primera División tras un excelente paso por la categoría de plata. El pivote uruguayo, pieza clave durante los compromisos del mes de enero que han servido al Glorioso para ampliar el margen respecto al descenso, reflexionó durante la mañana del miércoles sobre su adaptación al fútbol europeo y su trascendencia en el equipo de Luis García.
El fornido centrocampista de Montevideo ha sido uno de los grandes beneficiados por el periplo copero tras protagonizar actuaciones muy meritorias en duelos como los del Sevilla y Betis. “Estoy muy contento de poder sumar donde me toque. En este mes he tenido bastante participación y estoy satisfecho por ello. En lo personal feliz y trataré de continuar por este camino. El grupo está en plena forma y tenemos que seguir trabajando para que la dinámica se mantenga”, manifestó Benavídez, quien aseguró estar siempre disponible para lo que le pida Luis García.
El pivote se refirió a la estelar dupla Ander Guevara-Antonio Blanco reconociendo que ambos “lo vienen haciendo de gran manera, son los titulares y están haciendo una gran pareja”. En este sentido, Benavídez agregó que le toca “aportar donde pueda, en la marca, la contención y estabilizar al equipo”.
La adaptación de Benavídez a la máxima categoría no ha sido sencilla. Durante el primer tercio del campeonato apenas dispuso del protagonismo deseado tras sufrir problemas musculares y le costó encontrar su hueco dada la solvencia de Antonio Blanco. No obstante, el centrocampista se ha asentado en los esquemas de Luis García como un elemento imprescindible en la rotación y también ha sabido controlarse en cuanto a su exceso de revoluciones en las acciones divididas.
Así lo explicó el propio futbolista, quien reconoció que “en gran parte es un tema de adaptación”. “Nos gusta jugar al límite y eso conlleva llegar tarde a algunas disputas. Lo he estado trabajando, me puedo contener mucho más para llegar con más tiempo al balón y llegar a las disputas bien posicionado”, expresó Benavídez, quien añadió que ha trabajado con perseverancia en estos últimos meses.
“Me caracterizo por ser así, lo he trabajado mucho con el cuerpo técnico y nuestro psicólogo Emilio. Él me ha ayudado con el tema de la respiración para relajarme en la noche anterior a los partidos”, añadió Benavídez acerca de su trabajo invisible lejos del terreno de juego. Además, el uruguayo confesó que antes del pitido inicial intenta aislarse un poco “para buscar la tranquilidad”, aunque también reconoció que “rascar” es lo que más le gusta y que lo llevará siempre impregnado en él.
Ilusión ante el Barcelona
Por otro lado, Benavídez puso el foco en el próximo desafío que se le presenta al Deportivo Alavés. Tras superar con nota el mes de enero, los de Luis García reciben este sábado al Barcelona, uno de los rivales más poderosos del campeonato. “Es un equipo con bastantes fortalezas, otra cosa es que no les estén saliendo las cosas. El Barcelona tiene mucha calidad y cuando te descuidas te castigan. Por eso, reitero que tenemos que estar concentrados durante todo el partido”, advirtió el pulpo de la sala de máquinas albiazul.
En esta misma línea, Benavídez recalcó que “sobre el papel estamos en plena forma, pero el rival que viene a nuestra casa todavía no ha perdido como visitante”. “No hay que olvidarse de que es el Barcelona. Es un bonito partido para poder disfrutarlo y sumar los tres puntos en casa. Si maduramos bien el encuentro vamos a tener nuestras opciones para sumar”, sostuvo con un moderado optimismo.
Al ser preguntado acerca del interés del Betis por Luis Rioja, Benavídez quiso cerrar filas y mostrar la unión que impera en el vestuario albiazul. “Estamos al tanto del tema, pero dentro del vestuario preferimos que no entre nada de lo que se rumorea. Luis está bien, todos sabemos que es un gran profesional y sigue enfocado en nuestro próximo objetivo, que es el Barcelona. Sabe manejar esas situaciones, lo está tratando de gran manera sin que afecte al grupo”, zanjó el uruguayo.