Llegan fechas muy significativas, que destacan por una gran actividad comercial y con multitud de actividades en pueblos y ciudades, que se engalanan con motivo de la Navidad y para acoger a propios y extraños en sus calles, plazas, tiendas y establecimientos de hostelería.
Ladrones especializados
Son días señalados para una inmensa mayoría de la ciudadanía, y también para los ladrones y, sobre todo, para aquellos especializados en el robo de viviendas.
El incremento de la actividad social cuando el calendario descuenta sus últimos números también motiva a un tipo de delincuencia que busca, fundamentalmente, oro, efectivo y joyas en chalets ubicados en la zona rural y que, por mor de las circunstancias, tienen más posibilidades de estar vacíos estos días, al menos, durante unas horas o días.
Faldas del Gorbea
Es lo que pasó la pasada semana en varias localidades ubicadas en las faldas del Gorbea. Según ha podido conocer DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA, los amigos de los ajeno hicieron su agosto en pueblos como Murgia o Sarria, que destacan, precisamente, por su fisonomía urbana, con profusión de viviendas unifamiliares y adosados. En ellos actuaron los ladrones sin ser detectados amparados en la oscuridad y en el silencio de zonas con poco tránsito urbano en horario nocturno.
Hechos recurrentes
En conversación directa con un agente de la Ertzaintza con lustros de experiencia a sus espaldas a la hora de lidiar con este tipo de ilícitos en Álava y que es conocedor de los hechos relatados, este diario ha podido conocer que este tipo de hechos suele darse con cierta frecuencia en distintas zonas del territorio.
Ocurre en aquellas comarcas en las que abundan construcciones como chalés y similares. Se da la circunstancia de que este tipo de formato residencial facilita pasar desapercibido una vez dentro, ya que no hay vecinos directos y la vida en las calles es mucho más relajada que en Gasteiz o en municipios con cierta trama urbana.
‘Modus operandi’
Ya el pasado mes de mayo se conoció que existen organizaciones criminales itinerantes, habitualmente, llegadas de países del Este europeo o del Cáucaso, perfectamente especializadas y con la experiencia y formación suficientes que acceden a distintos municipios alaveses de manera recurrente para robar viviendas.
Durante los últimos días de abril y primera semana de mayo se produjo una oleada de robos en varios pueblos y también (aunque en menor cantidad) en la capital alavesa. Al respecto, se reportaron incidencias que cumplen con los citados parámetros en localidades como Eguileta, Agurain o Elosu.