El Consejo de Gobierno de la Diputación Foral de Álava ha aprobado la suscripción de un convenio con la Junta Administrativa de Quintana sobre compensaciones por limitaciones de uso y aprovechamientos en la reserva integral de Lakunduz en el Parque Natural de Izki, con el objetivo de "dotar al parque natural y a los espacios ZEC y ZEPA de una zona en la que los procesos relacionados con la diversidad biológica sigan su curso natural, creando un laboratorio natural para el estudio de los ecosistemas".
En un comunicado, la institución foral ha destacado que el acuerdo supondrá actualizar la valoración de las indemnizaciones conforme a la evolución de la masa forestal y el incremento de los posibles aprovechamientos no explotables.
"Los bosques maduros son un modelo de referencia para la investigación y la gestión de las masas forestales"
Concretamente, desde la institución foral se ha aprobado la consignación de 8.761 euros a favor de la Junta Administrativa de Quintana. De esta manera se cumplen las directrices de la Comisión Europea respecto del establecimiento como reserva integral de un 10% de la superficie del total declarada como espacios naturales.
Bosques maduros
Con esta iniciativa, la Diputación pretende reservar los bosques y, sobre todo, las masas más maduras, al ser "una herramienta imprescindible para hacer frente a uno de los retos ambientales más importantes del siglo XXI".
En este sentido, ha explicado que "los bosques maduros son los que tienen árboles añosos y jóvenes de diferentes edades y diferentes especies, presencia de madera muerta en pie y en el suelo, así como huecos o claros en la masa, lo que incrementa la biodiversidad en especies y microhábitats".
Por ello, "los bosques maduros son un modelo de referencia para la investigación y la gestión de las masas forestales y de la adaptación o capacidad de resiliencia de los ecosistemas naturales ante el cambio climático".