El desmantelamiento de la central nuclear de GaroñaAlex Larretxi
16
Hace escasos días, DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA explicaba cómo han empezado ya las obras de tres de los cuatro parques solares llamados a sustituir en generación eléctrica a la central nuclear de Santa María de Garoña, ubicada en el burgalés Valle de Tobalina, municipio rayano con varias comarcas alavesas y que dista de Gasteiz apenas 40 kilómetros en línea recta.
El desmantelamiento de la central nuclear de GaroñaAlex Larretxi
16Fase 1
Esas instalaciones, que se ponen en marcha tras una inversión de 360 millones de euros en La Bureba y Las Merindades, funcionarán en unos meses como alternativa real al complejo atómico, ya inmerso en la denominada Fase 1 de su proceso de desmantelamiento.
En imágenes: Así es la central nuclear de Garoña desde dentroAlex Larretxi
91En la actualidad se están ejecutando los primeros ensayos sobre el terreno para garantizar la viabilidad del Edificio Auxiliar del ATI (Almacén Temporal Individualizado)
Nuevo ATI
En concreto, tal y como ha podido confirmar este diario, en la actualidad se están ejecutando los primeros ensayos sobre el terreno para garantizar la viabilidad del Edificio Auxiliar del ATI (Almacén Temporal Individualizado), contemplada en el séptimo Plan General de Residuos Radiactivos para el mantenimiento de contenedores con el combustible vaciado de las instalaciones en desmantelamiento.
Residuos
Esta instalación, según especifican desde el Consejo de Seguridad Nuclear, que es el organismo público encargado de velar por la seguridad nuclear y la protección radiológica de las personas y del medio ambiente, tiene por objetivo albergar el combustible irradiado o cualquier otro residuo de alta actividad o larga vida proveniente de una central nuclear dentro de su propio emplazamiento y hasta su traslado, bien a una instalación de reproceso, una instalación de Almacenamiento Temporal Centralizado (ATC) o bien a un Almacén Geológico Profundo (AGP).
La instalación que se construya acogerá un espacio de 7.200 metros cuadrados construido con hormigón armado con dos grandes losas sísmicas
Caso de Garoña
En el caso de Garoña, la instalación que se construya acogerá un espacio de 7.200 metros cuadrados construido con hormigón armado con dos grandes losas sísmicas sobre las que se almacenarán 16 contenedores fabricados por la empresa Ensa en cada una.El recinto, que estará al aire libre, incluirá una zona con pavimento perimetral sobre el que rodará el sistema de transporte.
Tipología
Habitualmente, este tipo de instalaciones temporales se sitúan en superficie o a relativamente pocos metros de profundidad. La diferencia fundamental entre un ATI y un Almacenamiento Temporal Centralizado (ATC) reside en que los primeros están destinados a almacenar los residuos de una misma central nuclear y suelen estar situados dentro de su emplazamiento y los segundos albergan los residuos de todas o varias de las centrales nucleares de un país.
Combustible gastado
El ATI de Garoña se construye para dar salida al combustible nuclear gastado, en un futuro destinado al ATC de Villar de Cañas, y permitir prolongar su operación, cuyas piscinas de almacenamiento de combustible nuclear gastado se saturaran antes de la parada definitiva de la central.
Sea como fuera, en el caso de Garoña, y bajo la supervisión de Enresa, la sociedad pública encargada de la gestión de los residuos radiactivos que se generan en el Estado, así como del desmantelamiento de las instalaciones nucleares y de un equipo geológico especializado, se han tomado diversas muestras a partir de técnicas diferenciadas, pero complementarias para conocer al detalle el subsuelo sobre el que se erigirá la nueva construcción.
Seis catas con retroexcavadora
De este modo, se han realizado seis calicatas o exploraciones mecánicas con una retroexcavadora, además de otros trece sondeos con una máquina perforadora que permite la obtención de estratificados del terreno.
Hasta 12 metros de profundidad
De acuerdo con los geólogos implicados en las labores, se han recogido muestras de hasta 12 metros de profundidad, algunas de ellas procedentes de la era Mesozoica, también conocida como la era de los dinosaurios, acontecida hace 65 millones de años. Pero más allá del contexto, las muestras habrán de someterse a ensayo para garantizar una futura construcción estable y resistente.
Zona de clasificación
En la misma línea, y para ganar en agilidad a la fora de gestionar la catalogación de los residuos derivados del proceso de desmantelamiento, desde Enresa, que es quien está gestiona la totalidad del proceso, se indica que la central nuclear cuenta con una nueva cabina de desclasificación.
Bidones de distintos tamaños
Esta sirve para medir la actividad de bidones de distintos tamaños mediante un total de 24 detectores, los cuales determinan si el material está limpio o contaminado y si es apto o no para desclasificar y gestionar como material convencional.
Dicha cabina pesa alrededor de 16 toneladas, cuenta con 24 detectores y con un sistema automático para su manejo y diferentes tipologías de embalaje para poder realizar dichas mediciones.