En total, las indemnizaciones del seguro agrario, a final de año, contando todas las líneas relacionadas con los cultivos más tradicionales y numerosos y los seguros pecuarios (vacuno, ovino o equino) podrían rondar ya los 9 o 10 millones de euros en el conjunto del sector primario de Álava, “cifras inéditas”, para Agroseguro.
Son, además, cantidades que demuestran “el complicado” año que se ha sufrido en Álava (ausencia de precipitaciones, sequía, tormentas muy violentas de pedrisco, lluvia e inundaciones) y la utilidad del seguro agrario como herramienta de protección para los agricultores y ganaderos ante los fenómenos meteorológicos adversos y cada vez más recurrentes y graves que se sufren en el campo.
En total, durante los últimos cinco años (entre 2018 y 2022, que se corresponde con el último ejercicio completo cerrado), Agroseguro ha abonado 18,81 millones de euros en indemnizaciones. Aunque la uva de vino y los cereales registran los mayores daños, también se producen siniestros cada año en hortalizas, cultivos forrajeros, remolacha o en las líneas de seguros ganaderos, explican desde la citada entidad.
Respecto a lo vivido durante los últimos meses en los campos del territorio histórico de Álava, los datos, facilitados por Agroseguro situaban en agosto el global de las compensaciones reclamadas y concedidas por el campo alavés en 6,4 millones de euros. Esa cifra deviene de los daños ocasionados especialmente por la granizada de mediados de julio.
Álava, la más afectada La citada organización recoge en sus propios medios corporativos que fue Álava, junto a Zaragoza, las provincias que peor parte se llevaron de aquel episodio de pedrisco. En concreto, en el territorio histórico se vieron afectadas 7.643 hectáreas.
En tierras mañas fueron 5.394 hectáreas las malparadas. Entre ambos campos concentraron la mayor parte de los daños, que también se extendieron por La Rioja, Navarra, Burgos, Soria y Teruel. El cultivo con mayores daños fue el cereal de invierno, que, debido a su carácter tardío en las zonas afectadas, se encontraba aún sin cosechar, aunque se registraron daños en otra veintena de producciones. – C.M.