La salud mental de los jóvenes alaveses preocupa y también está ocupando a los profesionales que día tras día velan por ella. Más si cabe ahora, en este contexto de pandemia, durante la que se está viviendo una epidemia paralela de enfermedad mental en este sector de la población.
Es el caso de Asafes, la asociación alavesa de familiares y personas con enfermedad mental, que va a celebrar mañana viernes en Vitoria un encuentro técnico para ahondar en la importancia de la atención temprana de este tipo de pacientes y, además, con apoyos en todas sus esferas vitales.
Según los datos en poder del colectivo, el 50% de los problemas de salud mental comienza antes de los 14 años y el 75%, antes de los 18. Covid-19 mediante, estas cifras incluso podrían quedarse cortas.
Datos "espeluznantes"
"Algo está pasando, porque cada vez se atiende a más jóvenes en salud mental y los últimos datos de suicidios de 2020 han sido bastante espeluznantes. Ya es la primera causa de muerte no natural entre los jóvenes. La pandemia ha hecho mella sobre la población más joven", certifica en declaraciones a este periódico Vanesa Vadillo, gerente de Asafes.
Las charlas que el colectivo acostumbra a dar en los centros escolares de Gasteiz han servido para hacer más visible esta preocupante realidad, porque han sido numerosos los profesores que, motu proprio, han pedido ayuda a la asociación para gestionar "ciertas vivencias" que se están dando entre el alumnado y para las que no disponen de herramientas.
"Muchas" autolesiones o cuadros de ansiedad y depresión ante los que "no están formados", según remarca Vadillo, quien no oculta su inquietud ante lo que pueda derivarse de una crisis sanitaria que sigue alargándose.
El ejemplo de Erroak
El encuentro técnico, quinto de estas características que celebra Asafes y que tendrá lugar en el centro cívico Aldabe, arrancará con una ponencia a cargo del doctor en Psicología Manuel Hernanz, tras la que la asociación presentará los resultados de su proyecto de espacio joven Erroak, una iniciativa pionera en Euskadi para dar soporte a jóvenes que debutan con enfermedad mental grave.
"Queremos poner de relieve que es muy importante dar el primer paso de acudir al especialista en salud mental para recibir la atención sanitaria, pero que también lo es recibir otro tipo de apoyos en ámbitos que son muy importantes en la vida, sobre todo para las personas jóvenes, y que pueden verse rotos, distorsionados", contextualiza Vadillo.
La aceptación de la enfermedad, la formación y la incorporación laboral, las relaciones familiares o la integración son solo unos pocos de los aspectos que deben atenderse desde los recursos sociosanitarios para que esos jóvenes puedan retomar sus rutinas lo antes posible y tener un proyecto vital como el resto de la población.
