El impacto de las crisis climáticas, demográficas y tecnológicas marcará profundamente la vida de la infancia en las próximas décadas, según advierte UNICEF en su informe El Estado Mundial de la Infancia 2024: el futuro de la infancia en un mundo cambiante, publicado en el marco de la celebración este 20 de noviembre del Día Mundial de la Infancia.
El informe pone de relieve que, para 2050, el número de niños y niñas afectados por olas de calor extremas se multiplicará por ocho en comparación con las cifras de principios del siglo XXI. Además, tres veces más niños estarán expuestos a inundaciones extremas, y casi el doble enfrentará incendios forestales en un mundo transformado por el cambio climático.
Un desafío inmediato y a largo plazo
La reciente DANA que azotó España ejemplifica la urgencia de proteger a la infancia ante desastres climáticos. Gustavo Suárez-Pertierra, presidente de UNICEF España, señaló que más de 163.000 niños y niñas en la Comunitat Valenciana han sufrido las consecuencias de las inundaciones. "Es fundamental garantizar su vuelta segura a las aulas, así como su bienestar emocional tras el trauma sufrido", subrayó. Mientras se rehabilitan las escuelas, la organización insta a crear espacios seguros y alternativos para la educación y la socialización de los menores.
La exposición a fenómenos climáticos extremos dependerá en gran medida del acceso a recursos básicos como agua potable, infraestructuras resistentes, atención sanitaria y educación. Por ello, UNICEF hace un llamado a priorizar políticas medioambientales que protejan a la infancia y reduzcan su vulnerabilidad.
El informe también destaca el impacto de los cambios demográficos, con un crecimiento significativo de la población infantil en África subsahariana y el sur de Asia, mientras que regiones como Europa Occidental y Asia Oriental verán una disminución de su proporción infantil. Estos cambios suponen desafíos para equilibrar recursos y servicios, especialmente en áreas con poblaciones envejecidas.
En cuanto a la tecnología, aunque se prevén avances significativos en educación y conectividad, persisten desigualdades graves. Mientras que más del 95% de las personas en países de renta alta están conectadas a internet, solo el 26% lo está en países de renta baja, dejando a millones de niños y niñas sin acceso a competencias digitales esenciales para su futuro.
Priorizar los derechos de la infancia
UNICEF subraya la necesidad de colocar los derechos de la infancia en el centro de las políticas globales. Entre las recomendaciones, el informe destaca invertir en infraestructuras y servicios sostenibles y resilientes para la infancia; impulsar la conectividad digital y garantizar un diseño seguro de las tecnologías para los menores, y elevar la resiliencia climática en comunidades y sistemas esenciales.
"Las decisiones que tomemos hoy determinarán el futuro de millones de niños y niñas en el mundo. Este Día Mundial de la Infancia nos recuerda que aún queda mucho por hacer para garantizar sus derechos y bienestar en un mundo cambiante", concluyó Suárez-Pertierra.