El Tribunal Supremo ha condenado a un empresario de Manises (Valencia) a un año y medio de prisión y al pago de una indemnización de 155.963 euros a Desigual por la venta de casi 4.000 bolsos falsos de esta marca.

Durante una inspección en su establecimiento, situado en el polígono industrial La Cova de Manises, la policía halló 3.746 bolsos, imitación de los originales, que causó un perjuicio económico a la mercantil Abasic, que era titular de los derechos de explotación de las creaciones de Desigual.

El tribunal estima el recurso de Abasic y anula la sentencia de la Audiencia de Valencia que absolvió a este empresario de un delito contra la propiedad intelectual. La Sala repone así la condena que un juzgado de esta localidad le impuso en primera instancia.

La marca, "blindada" ante falsificaciones de los diseños

El Supremo explica que "la originalidad, capacidad de innovación y la exclusividad de esos estampados había sido ya reconocida a través de una inscripción en los asientos del Registro de la Propiedad Intelectual que, desde ese mismo momento, blindaba al creador frente a utilizaciones inconsentidas de los diseños".

Dice la Sala que "los imitativos estampados de la firma Desigual adheridos a los bolsos distribuidos por los acusados iban mucho más allá de unos simples objetos destinados a una finalidad práctica y limitados en su diseño a generar un efecto visual propio y considerable desde el punto de vista estético".

"Se trataba, por el contrario, de obras artísticas que reunían todas las condiciones exigidas para la protección penal de la creatividad intelectual", concluye el tribunal, dejando claro que los bolsos se reproducían total o parcialmente los diseños de Desigual de las colecciones registradas, lo que tilda de "plagio".