gasteiz- "La gente se pasa el día hablando de fútbol y le parece normal; tu hablas un día de la eutanasia y dicen que estás chalada. Yo les digo a estos señores que son ellos los que están confundidos; los que no hablan más que de tonterías futboleras", señala a DNA, Rosalía Miranda.¿Legislar cuando la bioética está de por medio es discutible? ¿Supone un plus de dificultad?

-No tiene porqué. Lo que llamamos ética y bioética, en términos democráticos políticos lo convierto en civismo o en derechos civiles. Para mí, la legislación debe ser sobre derecho civil. La ética es un concepto moral y tu puedes tener una frontera en tu ética y yo otra. Mientras que en términos civiles-democráticos somos las dos iguales. Este tipo de legislaciones lo que tienen que cubrir es el derecho democrático, como ocurrió con el voto de la mujer. Cuando se planteó ,ponían la ética sobre la mesa para decir que no había que dar el voto a la mujer porque eran incapaces de entender esas cosas tan complejas.

¿Cree que la cultura cristiano- humanista pesa a la hora de legislar sobre la muerte digna?

-Está claro que en un país como el nuestro el catolicismo ortodoxo ha ejercicio una gran presión. En Bélgica cuando se hicieron los primeros estudios para promulgar la ley, aunque muchos médicos pertenecían a movimientos católicos de la universidad católica de Lovaina, que fue la que impulsó estudios de cómo se morían para luego hacer la ley, el propio centro no apoyó las posiciones dogmáticas de los obispos. En Bélgica muchísimos católicos y cristianos no siguen los mensajes que lanzan los obispos, la jerarquía.

Porque Bélgica es un país con mayor pluralismo político y religioso que el Estado español

-Aquí estamos acostumbrados a un monolítico catolicismo, aunque se están introduciendo otras religiones minoritarios, pero no estamos habituados a un pensamiento laico que ordene nuestra vida civil. El pensamiento católico se está inmiscuyendo en asuntos que conciernen a la población en general.

Este mundo es un valle de lágrimas, dicen ¿El dolor va unido a la vida? ¿Lo cree así?

-Para nada. Yo creo que venimos a la vida a disfrutarla, a dar el mínimo posible de guerra a los demás que viven con nosotros, a colaborar con los que tienen problemas y básicamente a disfrutar de la vida responsablemente. Lo del sufrimiento y el dolor obedece a una concepción que tienen algunos del mundo de la procedencia cultural de la que venimos. El derecho a morir de forma digna es un asunto que nos afecta a toda la población. Me indigna que los que tienen que organizar medianamente bien nuestra forma de vivir y morir no se tomen el tema en serio.

¿Por qué?

-Porque tienen miedo a preguntar lo que piensa la ciudadanía sobre la eutanasia. Si no fuera así harían una encuesta entre la población como ocurrió en Holanda que pasó 30 años discutiendo el tema y llegó a tener su ley de eutanasia y de suicidio asistido. Una norma que fue fruto de preguntas a la población y de estudios médicos y jurídicos; la forma en la que Bélgica ha llegado a la actual legislación, más avanzada que la holandesa, ha sido similar: consultando a la gente y elaborando estudios entre quienes atienden a las personas que podrían beneficiarse de la eutanasia.

¿Hay mucho populismo en este tema?

-La gente tiene cuatro clichés que han oído, muchas veces de forma interesada, y los repiten. Suelo escuchar que si se aprobara aquí una ley similar a la de Bélgica y Holanda peligrarán las vidas de los ancianos, y barbaridades similares. Y según todos los estudios esto es mentira. Al derecho a morir dignamente llegan personas con autonomía y con plenas capacidades mentales, pero que un momento determinado dicen no querer seguir adelante. Éste fue el caso de José San Pedro.

Si los legisladores conocieran el sufrimiento de cerca, ¿Habría ya una ley?

-Una persona que conoce de lejos el sufrimiento de las personas con dolencias en fases terminales o no, es difícil que entienda la petición de estos pacientes. Es tremendo que a una persona que le queda un mes de vida y demanda una muerte digna, se le niegue. Yo no quisiera vivirlo. .

Desde hace una década en la mayoría de los hospitales hay Unidades del dolor y cuidados paliativos ¿Son complementarios con el derecho a una muerte digna?

-Es estupendo, pero es que los cuidados paliativos no se oponen a la eutanasia. Es como si por tener estos cuidados no dispusiéramos de unidades de reanimación. Para determinadas situaciones los cuidados paliativos son una solución y una manera de vivir la vida, pero eso no invalida la eutanasia. Los belgas definieron bien lo que es la eutanasia

¿Cómo?

-Como un acto realizado por una persona que pone fin a la vida de otra de manera intencionada a petición de esta última. Ósea la ley belga deja la responsabilidad siempre en los médicos. Puede suceder que cuando estás en una Unidad de Cuidados Paliativos tu ya estés sin conocimiento por las drogas contra el dolor y no tienes posibilidad de decidir.

¿Qué argumentos me daría a favor de legislar la eutanasia?

-Al igual que este país mira con tranquilidad el derecho al divorcio, que lo utilizas si lo necesitas, a los matrimonios gays y el aborto, la eutanasia debiera de ser vista con normalidad y como una conquista. Hace cien años si alguien hubiera dicho que las parejas del mismo sexo podrían casarse, la gente hubiera pensado que estaba loca. Del mismo modo que se logró el voto femenino, el divorcio.... conseguiremos que la eutanasia sea legal; lo único que en lugar de 10 años tardaremos 20 o más. El PSOE lo llevaba en su programa y lo abandonó. Por desgracia, no tenemos políticos valientes, por eso vamos dando bandazos

Una ley protegería a los médicos sobre la medicina compasiva

-La ciencia debe de estar a disposición de las personas, no sujeta a juramentos hipocráticos de hace 500 años. También los facultativos deben avanzar hacia una medicina compasiva. En la Asociación vemos a muchos que son favorables a que se regule la muerta digna, porque en su día a día ven situaciones horribles. Y se miran en el espejo de países de nuestro entorno que dan salida a terribles sufrimientos. Una Ley tasaría cuándo el profesional debe ayudar a un paciente a morir antes de que pierda la conciencia.

¿Existe alguna posibilidad de que en el Estado se den las condiciones para una ley como la belga?

-Quiero pensar que sí, porque si no seríamos un país sin capacidad de evolución. Nuestros políticos tienen la obligación de hacer encuestas, pedir estudios de cómo se muere en este país. Según los datos, el 80% de la población estaría a favor de la ley.

La extensión de la eutanasia a los niños en la Ley belga, que por cierto es muy exigente, ha levantado la ira entre los conservadores.

-Son condiciones duras porque son garantías de un estado democrático. Desde sectores conservadores no quieren hablar en serio sobre el tema y se dedican a decir tonterías como que la frontera de Alemania con Holanda se está llenando de viejitos belgas. Para acceder a la eutanasia tienes que ser ciudadano/a belga. El único país que admite que un extranjero reciba ayuda al suicidio es Suiza. Me parece vergonzoso que gente que tiene conocimiento confunda quien no lo tiene; tendría que ser al revés, enseñar al que no sabe. Enma Bonino lo decía hace 15 años, la democracia en este siglo es que el conocimiento científico y real de las cosas llegue al pueblo, a la gente, que ésta no viva de mitos. ¿Quién quiere ver a su hijo en estado vegetativo? Es un infierno.

¿El testamento vital nos protege?

-Es lo único que hay. Es insuficiente, pero sí permite negarte a que te apliquen determinados tratamientos. Recomiendo a la gente que se haga el documento de voluntades anticipadas; nuestra Asociación luchó por que existiera este documento; ahora peleamos porque se amplíen los derechos. El camino se hace andando.